Durante este año Diputados se reunió 15 veces hasta ahora; dos menos que en el mismo período de 2005 y 16 que en 2006. El Senado tuvo 13 sesiones, contra 25 de 2006 y 22 de 2005, hasta la segunda quincena de octubre.
Por Pablo Winokur
2007 Año de elección presidencial. Año de la sucesión de Néstor Kirchner y de ¿la asunción de Cristina? Pero seguramente en el Congreso será recordado por ser uno de los períodos de menor trabajo legislativo de los últimos años.
Cabe recordar que durante la presidencia de Eduardo Duhalde el Poder Legislativo fue el que sostuvo la vida democrática en el país. Desde entonces hasta ahora tuvo escaso protagonismo. A partir de 2003, el eje central de la política se volvió a centrar en la Casa Rosada, tal como sucedió durante la presidencia de Carlos Menem o incluso de Fernando de la Rúa, quien estrenó el mecanismo de los superpoderes.
Diputados y un nuevo récord
Durante 2005 comenzó a vislumbrarse la merma en la tarea legislativa. La campaña presidencial había anulado por completo el rol de la Cámara de Diputados. Aunque en realidad no fue solamente por esta particularidad, sino por los diferentes grupos existentes en interior del bloque justicialista, que todavía no estaba cobijado en el FpV. Todavía el duhaldismo dominaba la Cámara baja y el kirchnerismo ante esta realidad se oponía a sesionar, ya que no sabían a dónde podía llevar una reunión de esa Cámara dominada por opositores.
El entonces presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño (encolumnado en el duhaldismo) hizo malabares para intentar sesionar, lo cual consiguió en contadas ocasiones. La última, la heroica, fue cuando parte de ese oficialismo, consiguió sancionar, junto a la oposición, la suspensión de los remates hipotecarios, medida resistida por el Gobierno y principalmente por su ministro de Economía, Roberto Lavagna.
2005 fue un año para olvidar para la Cámara baja. Sólo hubo 11 sesiones. Hasta la segunda quincena de octubre habían convocado a 35 reuniones plenarias, pero sólo 15 prosperaron, incluyendo las que continuaron luego de un cuarto intermedio. En 2006, en las mismas fechas hubo un repunte. 36 veces se convocó, en 31 oportunidades con éxito.
Lo curioso de este 2007 es que ni siquiera la oposición busca sesionar, con un recurso que es muy utilizado en Diputados: pedir sesiones especiales que luego tienen carácter testimonial. Hasta el 15 de octubre, sólo se habían hecho 16 reuniones (dos menos que en 2005), pero sólo se convocaron a 21.
Sube y baja
El Senado como órgano legislativo siempre gozó de un desprestigio. Desde el “Asesinato en el Senado de la Nación”, en la década del 30, hasta los sobornos de la “Banelco”, siempre este cuerpo fue mal visto por la opinión pública.
En 2001 por primera vez los miembros de esta Cámara se eligieron a través del voto popular y allí la historia comenzó a cambiar. En 2003, al asumir Daniel Scioli cómo vicepresidente, el Senado adquirió una dinámica particular y lentamente se empezó a dar vuelta la historia. Mientras que en 2005, Diputados había sesionado apenas 11 veces, el Senado se reunió en 30 oportunidades. Y hasta la segunda quincena de octubre fueron 22, apenas por debajo del número de sesiones que hubo en 2006, cuando entre enero y la segunda quincena de octubre hubo 25 encuentros.
Pero este año se tiró por la borda gran parte de lo realizado. Sólo 13 veces se reunió el Senado en lo que va del año, contra las 16 reuniones de sus pares.
Cuestiones metodológicas
Es importante aclarar que el trabajo en ambas cámaras -en lo que a número de sesiones se refiere- no es del todo comparable, por varios motivos. Si bien ambos reglamentos prevén determinadas cuestiones; en Diputados recursos como la sesión especial (que en general queda en minoría) o el pedido de cuarto intermedio que se extiende por varias semanas, hacen que el número de sesiones parezca mayor de lo que en realidad es. En caso de los pedidos de cuarto intermedio, éstos facilitan desdoblar las sesiones, y poder continuarla la semana siguiente sin necesidad de lograr el quórum. Por otra parte, a veces se retoma una sesión que pasó a cuarto intermedio, se finaliza y se comienza en seguida otra, con lo cual en un mismo día se termina sesionando dos veces lo cual ayuda para las estadísticas finales. Esto sucedió el 15 de agosto de este año, por ejemplo.
También la forma de cómputo permite que algunas sesiones se contabilicen como dobles: esto sucedió el 25 de abril y el 28 de marzo que se computan tres. Sin estos vericuetos legales, Diputados habría sesionado sólo 12 veces. Sin contar los cuarto intermedios, Diputados realizó 13 sesiones durante este período ordinario y dos más durante el extraordinario.
