La Cámara de Diputados arrancó el tratamiento de la ley de Presupuesto Nacional 2008. Una norma remitida por el PEN, que establece un crecimiento del 4 por ciento y una inflación anual de 7,7 puntos.

Precisamente esas cifras serán algunas de las que objetará la oposición durante un debate que se prolongará, se supone, a este jueves.

El tratamiento del proyecto pasó a un cuarto intermedio hasta este jueves a las 10 cuando sólo quedaban en el recinto treinta diputados nacionales.

La sesión comenzó con la exposición del titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados, Carlos Snopek.

Snopek defendió obviamente el proyecto del Ejecutivo señalando que “se está estabilizando la economía, estamos teniendo una plataforma sólida en la cual asentarnos”.

Previsiblemente, el diputado jujeño destacó las ventajas del presente presupuesto y hasta utilizó una terminología “médica” para expresar que “estamos curando al paciente; hoy la Argentina es distinta a la que teníamos antes”.

La alusión de Snopek tenía que ver con lo dicho por él ante la prensa a lo largo de todo el día ante cualquier cuestionamiento dirigido a las cifras oficiales. Es que el presidente de la Comisión de Presupuesto recuerda cada vez que puede cómo estaban las cosas antes de la llegada de este gobierno y, sobre todo, cómo estaban las cosas cuando “gobernaban los que hoy critican”.

A su turno, el diputado del PRO-Recrear Esteban Bullrich sostuvo que no se debía aprobar el proyecto, por cuanto “no se trata de decir que la Argentina es un país que sigue creciendo al 8 por ciento, mientras hay gente que se muere de hambre”.

El diputado lopezmurphysta dijo que “es hora de que cambiemos, la Argentina no puede seguir con este nivel de impunidad, de descontrol. Los fondos públicos son nuestros, en plata nuestra y de la gente que nosotros representamos, no se trata de levantar la mano porque están en el oficialismo”.

Uno de sus cuestionamientos estuvo dirigido al superávit que plantea el proyecto se conseguirá, entre otras cosas, a costas de los jubilados. No faltó su referencia a casos de supuesta corrupción en este gobierno, que él mismo se ha preocupado de investigar. Señaló que “va a haber superávit pero se le va a sacar plata a los jubilados. Siempre nos cuentan los mismos cuentos. No vamos a cambiar, vamos a seguir dejando que los fondos fiduciarios se manejen como se manejaron en el caso Skanska”.

El diputado Bullrich presentó un dictamen de minoría, señalando que “la práctica de subestimar metas de crecimiento, pronosticando un irreal 4% cuando sólo este año crecimos un 9% permite que el Presidente y Fernández direccionen los excedentes discrecionalmente”.

“Por eso, proponemos crear un fondo de reserva para estos recursos donde permanezcan hasta que el Ejecutivo sugiera al Congreso su destino”, había expresado antes de ingresar al recinto a través de un comunicado.

Bullrich añadió: “Este esquema superavitario de las cuentas del Estado, es falaz. Es consecuencia directa de la apropiación por parte del Gobierno de los recursos generados por el traspaso de más de $ 7.000 millones de las AFJPs a las arcas del Estado, poniéndose en riesgo el futuro de los haberes jubilatorios de millones de ciudadanos”.

También alertó sobre la influencia negativa de la falta de regulación de los fideicomisos públicos en el Presupuesto 2008. “Estos recursos -acotó Bullrich- experimentaron un crecimiento del 290% entre 2001 y 2006 pero carecen de control debido a su exclusión de la Ley de Administración Financiera. A esto se suma que el Proyecto autoriza al Ejecutivo a modificar el subsidio al gasoil. En lugar de que las petroleras vendan el combustible a precio subsidiado, el Gobierno entregaría los fondos directamente a las empresas de colectivos, dando vía libre al manejo oscuro de los fondos”.

También relacionado al tema de los fideicomisos Bullrich criticó la incorporación de un artículo autorizando los fondos que el Jefe de Gabinete considere necesarios para financiar la continuación de las obras del acueducto de Río Colorado pues, la primera parte de la obra está bajo investigación por corrupción.

Por su parte, el diputado del Frente del Movimiento Popular Claudio Poggi, presentó un dictamen de minoría. Al hacer uso de la palabra, dijo que “no podemos decir que estamos en una política de desendeudamiento cuando se adquiere deuda todos los años”.

Quien será el titular del bloque de la Coalición Cívica, Adrián Pérez, se ocupó de criticar la iniciativa oficial, hablando de “un presupuesto de ficción”.

“El Ejecutivo revierte la distribución de los recursos y porque todas las estimaciones son inexactas y falacias”, dijo el legislador opositor, según el cual “ninguna estimación indica que la economía puede crecer al 4 por ciento. Se subestiman recursos para subestimar el presupuesto”.

Por su parte, el vicepresidente primero de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Miguel Angel Giubergia, dijo que el país “se endeudará para construir el tren bala, mientras el ferrocarril Belgrano, que recorre 13 provincias, no tiene la asignación de ningún recurso”.

El diputado radical jujeño sostuvo que “nuevamente se insulta la inteligencia de los ciudadanos. El Gobierno predice un amesetamiento de la economía, que crecerá un 4 por ciento, y una baja inflación estimada en el 7 por ciento. Cualquier persona sabe que esta gestión hará lo imposible para seguir creciendo, a cualquier costo, incluso el de la inflación, que según nuestra estimación llegará al 19,5 por ciento”.

El monto superior dentro de los ingresos corrientes, que representa el 99 por ciento del total de los recursos, corresponde a los ingresos tributarios, previstos en 118.751.832.360 pesos.

El Estado también contará con los recursos provenientes de las contribuciones a la Seguridad Social, los ingresos no tributarios, la venta de bienes y servicios de las Administraciones públicas, las rentas de la propiedad y las transferencias corrientes.

Según establece la iniciativa, el proyecto de presupuesto establece un resultado financiero superativo de 7.976.338.807 pesos.