Superpoderes mediante, el Ejecutivo dispuso sumar más de 11.900 millones a las partidas preexistentes para poder hacer frente al aumento para los jubilados.
Por esta época en la que se discute el Presupuesto 2008, muchos insisten en preguntarse si tiene algún sentido toda la parafernalia que se arma en torno a la ley de leyes en el Parlamento, cuando los superpoderes le quitan toda la esencia al control legislativo de los dineros de la Nación.
Una nueva muestra sobre el tema acaba de darla la Jefatura de Gabinete, al modificar mediante las facultades especiales de las que dispone las partidas existentes.
La decisión lleva el número 584/07, publicada en el Boletín Oficial, que benefició, entre otros organismos, al Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI), el Instituto de Ayuda Financiera para el Pago de Retiros y Pensiones Militares (IAF), el Servicio Penitenciario Federal, la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía Federal, la Gendarmería Nacional y la Prefectura Naval Argentina.
Se reforzaron además los créditos asignados para el pago de los haberes, las asignaciones familiares y algunos gastos operativos, asignándose 11.016 millones de pesos adicionales para gastos corrientes y de 921 millones en las aplicaciones financieras.
El incremento total es de 11.937 millones de pesos en las autorizaciones de gastos de la Administración Nacional para el corriente ejercicio.
La mayor parte de los aumentos en los gastos corrientes fue destinada al pago de las prestaciones a cargo del Régimen Previsional Público, de las asignaciones familiares, de las jubilaciones y pensiones de las fuerzas armadas y de seguridad, y de las pensiones graciables y de ex combatientes.
