Las primeras medidas que anunció el senador Gerardo Morales hablan de su objetivo de posicionar al radicalismo como el principal partido de oposición al Gobierno.

Las siguientes, van en relación con las ya adoptadas durante los últimos tiempos por la administración nacional, condenatorias contra los denominados radicales K.

En tal sentido, Gerardo Morales aclaró que con el vicepresidente electo Julio Cobos la cosa “no tiene vuelta”, pero anticipó medidas disciplinarias con el resto de los radicales afines al kirchnerismo.

Entrevistado por Radio América, el senador jujeño señaló que “algunos gobernadores e intendentes aliados al Gobierno tendrán que ir a la junta de disciplina. Después, convocar a quienes quieran ratificar su compromiso con el partido: o están con el oficialismo o están con el radicalismo, que ha resuelto ser un partido autónomo”.

Es sabido que para Morales, los correligionarios que se han alineado con el Gobierno nacional no pueden seguir al radicalismo.

“No pueden pertenecer al radicalismo y seguir haciendo negocios con el Gobierno, no pueden ser oficialistas y oposición a la misma vez”, destacó el flamante presidente reelecto de la UCR, quien remarcó que tampoco ” queremos ir corriendo a los brazos de Carrió. Se van a ir terminando de a poco los proyectos personales que hacen sus propios partidos”.

¿Y Stolbizer? Morales se manifestó a favor de dialogar con la ex diputada a quien de todas maneras ve “cada vez más lejos”.