El diputado de la Coalición Cívica Sebastián Cinquerrui, integrante de la Comisión de Seguridad, manifestó su “profunda preocupación” por las declaraciones del ministro de Seguridad bonaerense Carlos Stornelli.

“Creo que hablar de delincuentes incorregibles, como lo hizo el ministro, da cuenta de una mentalidad discriminatoria que puede resultar muy peligrosa cuando se gestionan asuntos policiales”, afirmó.

El ministro Stornelli manifestó durante un acto por el Día de la Policía de la Provincia, en la Escuela Juan Vucetich, que no queremos más familias desmembradas a causa de muertes absurdas ocasionadas por delincuentes incorregibles. En el mismo acto, aseguró que sacará a la policía a la calle y que incrementará su poder de fuego.

“La gravedad de los dichos del ministro es tremenda. El debería ser mas cuidadoso en sus manifestaciones y ser conciente del auditorio que tiene delante”, manifestó Cinquerrui. El legislador agregó que “frente al pasado reciente en el que se habló de mano dura, meter bala a los delincuentes, o el cheque en blanco a la mejor policía o maldita policía, manifestar que los delincuentes son incorregibles arengando a cientos de uniformados, funciona como un incentivo para que algunos elementos marginales de la fuerza puedan tender a la violación de los derechos humanos”, reflexionó el diputado provincial.

“Históricamente, las consecuencia de este tipo de concepciones han sido destructivas –sostuvo-. El hecho de que una persona sea incorregible significa que ni la contención familiar, ni el trabajo, ni la educación, ni el sistema punitivo, ni el Sistema Penitenciario, nada en absoluto, pueden ayudar a alguien a reinsertarse en la sociedad. La consecuencia natural es siempre el exterminio. Yo le pregunto al ministro si alguien es incorregible qué se espera que haga la sociedad con él”.

El legislador invitó al ministro a la reflexión y a la prudencia, digna de un hombre con la responsabilidad política y social que embiste.

Por último, Cinquerrui recordó que “hay que tener sumo cuidado con lo que dice; luego de que Ruckauf llamara a meter bala a los delincuentes tuvimos que lamentar muchas muertes y los casos de corrupción policial se multiplicaron exponencialmente, así como los apremios ilegales y las torturas en las cárceles”. También se manifestó respecto de la supuesta intención del ministro de levantar la autoestima de la fuerza: “Todas las instituciones deben tener una moral profesional arraigada; pero una cosa es eso, y otra muy distinta es aprovecharse del dolor de las víctimas y apelar a una arenga lombrosiana en una institución que tiene serios antecedentes de gatillo fácil”.