Por César Montenegro

Un hombre de convicciones profundas y firmes. Referente legislativo del espacio PRO en la Legislatura porteña. Defensor inclaudicable de las posturas macristas en dicho cuerpo. Visceral en sus exposiciones, pero respetuoso de las concepciones de sus adversarios, no ha dejado de exacerbar ánimos en muchas oportunidades debido a sus alocuciones.

Así es el legislador Martín Borelli, presidente de la Comisión de Justicia del Parlamento porteño y vicepresidente 2º del bloque oficialista. Parlamentario entrevistó al diputado del PRO para conocer la situación de la Justicia y otros temas inherentes a la misma en el ámbito de la ciudad. A continuación los párrafos más sobresalientes de la entrevista.

– Hay un proyecto de reforma de la ley orgánica del Poder Judicial de la ciudad, ¿a qué obedecen las modificaciones que se pretenden introducir?

– En función de los cambios en la normativa que se fueron introduciendo en estos dos últimos años que finalizó adoptando un sistema de Justicia acusatorio, en el que la mayor carga en cuanto a lo laboral recae sobre los fiscales y no en los jueces, más la aprobación del convenio de transferencias de competencias penales a la ciudad; y como resultado de esas dos modificaciones legislativas que introdujimos se hacía necesario también adecuar o adaptar la estructura del Poder Judicial de la Ciudad a estas dos realidades nuevas. Por eso, lo que primero hicimos fue trabajar sobre el fuero Contravencional y de Faltas para que con la estructura actual, es decir con la misma cantidad de jueces que actúan en el presente, se pudiera atender la doble competencia, la Contravencional y la Penal. Además, creamos una cantidad mayor de fiscalías que fue acompañada de manera proporcional con la incorporación de defensores, para que se pudieran sustanciar debidamente los distintos procesos.

– La propuesta original de reforma preveía esos aspectos, pero en la medida en que se avanzaba se profundizaron las modificaciones. . .

– Cuando estábamos estudiando esta reforma y ya en el tramo final de su evaluación, se analizó también la posibilidad de realizar modificaciones en el otro fuero, el Contencioso Administrativo y Tributario, sobre la base de un proyecto que originariamente preveía la creación de 12 juzgados nuevos, la comisión llegó a la conclusión que en esta etapa eran necesario tan sólo cinco, entonces con el fuero único en materia Penal, Contravencional y de Faltas, y esta ampliación de cinco juzgados más al fuero Contencioso Administrativo y Tributario, nosotros considerábamos que estábamos listos como para tener al Poder Judicial en condiciones de -al menos- por unos años atender la demanda de Justicia actual que tiene la Ciudad.

– La introducción de modificaciones en la estructura judicial y la incorporación de nuevos juzgados, ¿estaba prevista en el Presupuesto 2008?

– En realidad el Presupuesto 2008 no tenía previsto modificaciones a la ley 7, en los términos que yo se lo estoy planteando, eso puede ser visto como un obstáculo, pero en realidad -como todos sabemos- la Legislatura puede en cualquier momento habilitar una ampliación presupuestaria, por sobre todo si tiene como fundamento una razón tan importante como es la de mejorar el servicio de Justicia. Es decir que no era un impedimento el que no estuviera presupuestado.

– Si las modificaciones eran de tal envergadura, ¿a qué se debe la postergación del tratamiento de la norma?

– Eso estaba muy avanzado, pero la agenda parlamentaria de finales de año trajo consigo otras urgencias que nos impidió aprobar ese despacho. Pero ahora vamos a arrancar desde la Comisión de Justicia sobre la base del acuerdo ya existente; y yo soy optimista respecto de que en la primera parte del año la vamos a aprobar. Además se dio simultáneamente el cambio de autoridades, la asunción de los nuevos ministros, aunque el nuevo ministro de Justicia apoyaba que el Cuerpo tratara la reforma. Por lo que, reitero, fue un tema estrictamente de la Legislatura por lo cual no se trató.

– ¿Cómo observa usted el proceso de traspaso de la Policía a la órbita de la Ciudad?

– Está menos avanzado de lo que nosotros quisiéramos. Es decir, después de aquella modificación legislativa que se hizo a la ley Cafiero, le diría que prácticamente no hubo mayores avances normativos y, en cuanto a la negociación política, por ahora no hemos recibido desde el Poder Ejecutivo Nacional ninguna otra señal. Espero que haya una fuerte reanudación de tratativas sobre este punto, porque la modificación a la norma que le menciono no alcanza para resolver el clima de inseguridad que hoy existe en la ciudad de Buenos Aires. La posibilidad que le han dado a la ciudad de constituir su propia policía representa para nosotros -a la Ciudad como Estado y a los porteños en particular- un esfuerzo de varios años.

– ¿No encuentran reciprocidad en las tratativas?

– En absoluto. Lo que hizo el Congreso de la Nación fue remover el impedimento que la Ciudad tenía, de contar con una fuerza de seguridad propia. En ningún momento avanzó sobre lo que realmente es el mandato constitucional, la transferencia de los servicios -recordemos que el traslado de la administración de servicios a las jurisdicciones provinciales debiera ser con las partidas presupuestarias correspondientes-; en este caso la Policía habría que traspasarla con su presupuesto. Eso de ningún modo se ha dado, ni en la ley ni en los hechos.

– ¿La situación que describe dejaría entrever alguna discriminación?

– En rigor de verdad, y esto lo digo como porteño y no como dirigente del macrismo, nos sentimos discriminados en éste y en otros temas desde hace mucho tiempo. Por ejemplo, no tenemos el manejo de la Administración del Puerto, no podemos controlar todavía las líneas de subterráneos, no disponemos sobre el transporte colectivo de pasajeros que circula por la ciudad, los terrenos que administra el ONABE, es decir que hay una serie de situaciones que continúan en poder o jurisdicción nacional, que son anacrónicas y que no se ajustan al status jurídico y político que tiene nuestra Ciudad.

– ¿Cuáles serían las materias que adeuda la Legislatura a la ciudadanía porteña?

– Creo que hemos legislado mucho y bien. Hace una semana, nada más, pudimos avanzar con la sanción en primera lectura del proyecto del Plan Urbano Ambiental, que era una demanda generalizada de la opinión pública y de los sectores que pertenecen a las organizaciones civiles vinculadas con el espacio público y el medio ambiente y que se encontraba en mora desde hacía tres Administraciones por los menos. Sin embargo, esta Legislatura lo hizo. Ahora viene quizás un esfuerzo mayor para generar la discusión que posibilite la segunda lectura, ya que a fines de 2008 seguramente alcanzaremos ese objetivo. En ese sentido me siento muy satisfecho, fue un gran paso. Además, en materia judicial hemos trabajado muchísimo, desde la Comisión de Justicia se promovió la sanción del Código Procesal Penal Juvenil, el Código Procesal Penal y Contravencional, se trabajó mucho también en materia de seguridad escolar, han sido muchas y muy variadas las iniciativas.

– Personalmente, ¿qué tema le hubiera resultado satisfactorio que el cuerpo tratara?

– Personalmente me hubiera gustado que la Legislatura sancionara la modificación del Código de Tránsito en lo relacionado con el sistema de licencias de conducir. Creo que hubiera sido un año redondo si hubiéramos podido aprobar las licencias por puntajes.

– La ley que regulará las licencias con puntaje, ¿cuándo estima será abordada?

– En principio está prevista una sesión extraordinaria a realizarse el 5 de febrero con el objeto de tratarse el proyecto de ley sobre Creación del Sistema de Evaluación Permanente de Conductores de Vehículos de la Ciudad. Hay acuerdo para ser tratado en esa fecha. En cuanto al fondo de la cuestión, se sabe que generó mucha controversia. Se trató de avanzar, y de hecho se realizaron reuniones con los sectores involucrados, pero luego se interrumpieron, en parte porque ocurrió la renovación de autoridades a todo nivel, nacional y local, algunos de los diputados que trataban el tema ya no ocupan bancas, había que constituir las comisiones nuevamente y recién se han conformado, lo cual generó inevitablemente un bache, nosotros vamos a cubrir ese vacío y trataremos de llegar a febrero con un nuevo despacho.

– ¿Un nuevo despacho o se mantendrá el eje principal del proyecto analizado hasta ahora?

– Vamos a analizar un despacho nuevo, seguramente será mejor que el anterior, y contará con el mayor consenso posible; nosotros lo dijimos en todo momento: la vocación política de esta Legislatura era hacer un cambio de paradigma en esta cuestión de conducir en la ciudad.