La designación de Luis Buonomo como secretario de Estado a cargo de la salud de Cristina Fernández de Kirchner y su familia fue la causal de la primera iniciativa legislativa presentada en Mesa de Entrada de la Cámara baja.
Los diputados nacionales Oscar Aguad y José García Hamilton son los autores del primer proyecto del año 2008. La iniciativa que lleva el número 5784, es un pedido de informes al Poder Ejecutivo respecto al decreto Nº 150 /07 firmado por la presidenta Cristina Kirchner.
Este decreto designa al médico personal de Néstor Kirchner, Luis Buonomo, con el rango de secretario de Estado a cargo de la coordinación de la prevención y la atención de la salud de la Presidenta y de su familia.
Cabe aclarar que este proyecto pertenece al periodo legislativo del año 2007, ya que el año parlamentario 2008 comienza el 1 de marzo.
La medida no es del todo inédita si se toma en cuenta que Fernando de la Rúa designó a quien era su médico personal, Héctor Lombardo, ministro de Salud de su primer gabinete, en diciembre de 1999.
En el gobierno de Carlos Menem el médico presidencial también fue una figura del entorno del poder, pero no llegó a tener un cargo. El doctor Alejandro Tfeli integró el círculo más íntimo de aquella administración -incluso visitó a Menem cuando estuvo detenido en la quinta de Armando Gostanián y hasta lo acompañó en la última campaña por la gobernación de La Rioja-, aunque jamás lo premiaron con una designación.
El ascenso de Buonomo a funcionario del Poder Ejecutivo Nacional se oficializó el 31 de diciembre, cuando su designación salió publicada en el Boletín Oficial.
Sin embargo, el decreto (150/2007) está fechado el 26 de diciembre. Allí se especifica, en el segundo artículo, que el facultativo “tendrá a su cargo la coordinación del sistema de prevención y atención permanente de la salud de la señora presidenta de la Nación y su familia dentro del ámbito de la Casa de Gobierno y la Residencia Presidencial de Olivos”.
La misión de Buonomo, siempre según el decreto presidencial, también alcanza la atención de la familia de la jefa del Estado “en sus traslados y estadías dentro y fuera del país”. En otras palabras, está habilitado para acompañar como miembro de la comitiva oficial a los Kirchner a cualquier punto del mundo al que decidan trasladarse. En los hechos, eso ya ocurría en la gestión del ahora ex presidente.
El médico estrenó su nuevo rango cuando acompañó a Kirchner en su reciente excursión a Venezuela y Colombia como garante de la frustrada entrega de tres rehenes por parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Hasta ahora la situación de Buonomo podía equipararse a la de Tfeli, que acompañó a Menem en todos sus viajes, sin gozar de las prerrogativas de ser secretario de Estado.
Otra de las tareas que le asigna el decreto a Buonomo es la de realizar “la coordinación operativa de la Unidad Médica Presidencial”, que depende del Ministerio de Salud y que tiene como objetivo la atención de la jefa del Estado en caso de una emergencia.
Este decreto fue cuestionado por los diputados radicales.
