Desde el kirchnerismo acusan a Uribe de provocar "un genocidio". La derecha argentina plantea la conformación de una fuerza internacional de paz que controle la frontera entre los paises latinoamericanos. La UCR critica el viaje a Venezuela de Cristina Fernández.
“Uribe puede llevarnos al genocidio de la mano de los Estados Unidos”, disparó el legislador kirchnerista Edgardo Depetri, quien agregó que “la invasión militar colombiana, ordenada por Uribe en territorio ecuatoriano, genera un conflicto muy doloroso para toda Latinoamérica porque es una operación financiada por los Estados Unidos en el marco del Plan Colombia, cuyo objetivo es relacionar a las FARC con el narcotráfico y así fortalecer sus intenciones de instalar enclaves militares en su intento por controlar a los gobiernos progresistas de nuestro Continente”.
El diputado nacional y dirigente de la CTA consideró que “Uribe obedece a las intenciones de Bush de convertir a Colombia en un Israel de América del Sur para controlar a Venezuela, el segundo productor de petróleo del mundo, y después desestabilizar a Evo Morales para quedarse con el gas de Bolivia y así tapar el estrepitoso fracaso de la política norteamericana en Afganistán e Irak”.
Depetri recordó además que el fracaso de la misión para la entrega de rehenes en la que participó el ex presidente Néstor Kirchner “fue por culpa del Presidente colombiano, que la noche anterior bombardeó la zona prevista para la liberación” y advirtió que el presidente colombiano y estimó que “la respuesta del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, se corresponde con el compromiso de los países involucrados en la misión humanitaria, de la que también participa el gobierno francés”.
Desde el PRO, que enarbola la bandera de la derecha argentina y tiene un fuerte rechazo hacia las políticas del presidente Hugo Chávez, los diputados nacionales Federico Pinedo y Julián Obiglio, remitieron una nota al Canciller Taiana solicitando que la Argentina proponga en la OEA la conformación de una fuerza internacional de paz que controle la frontera entre Colombia y Venezuela.
Dicho cuerpo tendría como funciones impedir el tránsito de terroristas de un país a otro, y evitar que se produzcan incidentes como el recientemente sucedido en la frontera con Ecuador.
Por otro lado, los diputados macristas sugirieron – a título de colaboración con el Gobierno Nacional – que nuestro país propicie un acuerdo sudamericano para combatir al narcoterrorismo y evitar que miembros de las FARC puedan ser acogidos por países de la región.
Al respecto el diputado Obiglio expresó: “En vez de seguir coqueteando con Chávez sería bueno que nuestro Gobierno apoyará sin ambigüedades la lucha contra el terrorismo que lleva a cabo Uribe”.
Obiglio finalizó diciendo que “desde el PRO reconocemos nuestro rol opositor, por eso no buscamos interferir en la política exterior del gobierno, sino influir sobre ella”.
En tanto, la UCR brega porque LA UCR PIDE INTEGRACIÓN, DESMILITARIZACIÓN Y PAZ
El presidente del Comité Nacional de la Unión Cívica Radical, senador Gerardo Morales, junto a los titulares de los Bloques Legislativos del radicalismo, Ernesto Sanz y Oscar Aguad, enviaron una carta a la Presidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, atento a su visita a la República Bolivariana de Venezuela programada, tal como se informa en los medios de comunicación, para el próximo jueves 6 de marzo, solicitando sea la transmisora de un mensaje de integración, desmilitarización y paz para los pueblos de la región.
A continuación el texto completo de la misiva:
Atento a su visita a la República Bolivariana de Venezuela programada, tal como se informa en los medios de comunicación, para el próximo jueves 6 de marzo, desde el Comité Nacional de la Unión Cívica Radical y sus bloques legislativos solicitamos sea la transmisora de un mensaje de integración, desmilitarización y paz para los pueblos de la región.
Las últimas noticias sobre el grado de conflictividad que vive la zona de Colombia, Ecuador y Venezuela nos hacen reflexionar sobre el rol que como integrantes de la comunidad sudamericana de naciones debemos sostener. No podemos descuidar que la integración latinoamericana forma parte de los intereses permanentes y estratégicos de la República Argentina.
Ninguna ideología justifica el secuestro. Los Derechos Humanos por los que luchamos incansablemente en nuestro país, son los mismos que deben reivindicarse en cualquier país del mundo. Tal como lo ha expresado oportunamente el Canciller Jorge Taiana, “la Argentina considera que su historia le asigna una responsabilidad particular para promover y proteger los Derechos Humanos”.
Aún cuando la oposición en el Congreso de la Nación no ha ocupado ni una sola mención de su parte el pasado sábado 1 de Marzo, en el discurso de apertura de las sesiones ordinarias, tenemos la obligación constitucional de trasmitirle nuestra posición en materia de política internacional”.
En Colombia, Venezuela y Ecuador, se da una situación de doble intervención que rechazamos. Por un lado, la intervención directa de Colombia, reconocida por el gobierno del Presidente Alvaro Uribe, en territorio ecuatoriano; por el otro, la intervención indirecta de los gobiernos de Ecuador y Venezuela que actúan como dormitorios de la guerrilla colombiana.
Desde la UCR rechazamos ambas situaciones y pedimos lleve, bien en alto, la histórica posición argentina en los foros internacionales de autodeterminación de los pueblos y no intromisión en los asuntos internos de las naciones.
La integración del Continente en materia económica, energética, de desarrollo tecnológico, de protección del medio ambiente y el amparo de los derechos humanos, como cuestiones básicas, debería ser el mensaje que argentinas y argentinos acerquen a las comunidades del norte de Sudamérica a través de su presencia en Caracas”, continúan.
En la heterogeneidad de su composición, América Latina debe ser en el siglo XXI una unidad activa de colaboración, asistencia y cooperación en un marco de paz entre gobiernos y pueblos.
Asimismo, la diputada nacional por la UCR Sandra Rioboó aseguró que “en los últimos tiempos hemos asistido a una serie de absurdos que amenazan con producir una escalada beligerante entre tres naciones hermanas como son Ecuador, Venezuela y Colombia. El detonante de semejante despropósito resulta ser la inexplicable incursión de fuerzas armadas colombianas en territorio ecuatoriano en un ataque a las FARC que arrojó como resultado la muerte de 17 guerrilleros del grupo insurgente entre los que se contaba el líder rebelde Raúl Reyes”.
En ese marco, Rioboó afirmó que “es importante que los líderes latinoamericanos actúen con la responsabilidad y el temple necesario a los efectos de evitar cualquier irracionalidad que atente contra la paz del continente y ponga en riesgo la estabilidad regional”.
La diputada radical también recordó el informe de Naciones Unidas a través del PNUD cuya conclusión principal es que “el conflicto colombiano es una guerra de perdedores: Las FARC y el ELN en cuatro décadas de lucha armada están aún lejos de llegar al poder. Los paramilitares en 20 años de barbarie no han logrado acabar con la guerrilla. El Estado no ha sido capaz de derrotar a los insurgentes, ni de contener el paramilitarismo, ni de remover las causas del conflicto”.
“El contexto resulta altamente preocupante si a ello le agregamos los diferentes intereses que priman en nuestro continente y cuyas falsas antinomias son, a todas luces, producto de personalismos políticos y proyectos hegemónicos más que de diferencias insalvables entre los pueblos”, señaló la legisladora nacional.
“Se hace evidente que, independientemente de la repudiable actitud del Gobierno Colombiano, la soberanía de los pueblos y su derecho a la autodeterminación también se ve vulnerada cuando desde estados extranjeros se financian actividades insurgentes o grupos con determinada orientación ideológica o partidos políticos afines; o bien se realizan declaraciones sobre cuestiones internas de otros estados sin respetar a sus gobiernos y/o dirigentes políticos y sociales”, explicó Rioboó en clara referencia a las recurrentes actitudes del líder venezolano.
La diputada exigió la intermediación de la Argentina frente a la difícil situación por la que están atravesando los países hermanos de Ecuador, Venezuela y Colombia “para poner paños fríos y llamar a la racionalidad de sus referentes máximos frente a lo que podemos denominar la crisis por exceso que sufren. Asimismo afirmó que “hay que anteponer la ecuación democrática de nuestro continente por sobre cualquier acuerdo económico. Sería descabellado apoyar la movilización de tropas venezolanas a cambio de la venta de bonos o de la compra de energía”.
“Caso contrario estaremos colaborando con la exacerbación de una guerra de perdedores (Uribe – Chávez intentando resolver sus problemas internos a través de un nacionalismo cimarrón y vernáculo) que pondría en crisis las relaciones al interior de la región y ensombrecería el crecimiento y desarrollo de nuestros pueblos en un contexto pacífico”, finalizó.
