La fuerte crisis interna que atraviesa el Partido Socialista, dividido entre opositores y oficialistas, volvió a quedar expuesta durante la celebración del IIº Congreso Nacional Ordinario, en el que se resolvió llamar a elecciones para el 8 de junio próximo.
El PS celebró su encuentro con la asistencia de unos 600 congresales, en el coqueto Palais Rouge, de esta Capital, el mismo lugar en el que la Coalición Cívica (CC), con Elisa Carrió a la cabeza, aguardó los resultados de la elección presidencial de octubre último.
Sin embargo, ni Carrió ni la CC fueron mencionadas en el documento aprobado esta tarde, aunque, desde el sector que responde al presidente del partido, el senador nacional Rubén Giustiniani, se encargaron de destacar que “tampoco se hizo alusión” alguna en favor del gobierno nacional.
El encargado de cerrar el Congreso fue el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, quien, en vano, buscó acercar la postura de Giustiniani, y del diputado nacional Roy Cortina, ambos cercanos a la CC y decididos opositores al Gobierno, y de los “bonaerenses”, oficialistas, encabezados por el secretario general del partido, Oscar González, y el diputado nacional Ariel Basteiro.
Binner remarcó durante su discurso “la necesidad de la unidad partidaria y de mejorar la institucionalidad” del PS.
El diputado nacional Ariel Basteiro, del PS bonaerense y cercano al Gobierno, explicó que “el Congreso sirvió para que se reconozca por primera vez que conviven diferentes sectores” en el seno del partido de Justo y Palacios.
“El grupo bonaerense no había participado en los últimos congresos, ahora dimos la discusión, que terminó con un documento que se acerca a nuestro ideal. No habló de la CC, ni de Carrió”, destacó el diputado, que prefirió no hablar de las eventuales candidaturas partidarias para 2011, al sostener que “todavía falta mucho”.
Consultado sobre si primó entonces la visión “bonaerense” por sobre la que postula Giustiniani, Basteiro prefirió la metáfora futbolera: “Fue como sacar un 1 a 0 de visitantes. No hubo críticas al gobierno nacional, e incluso Binner y Giustiniani reconocieron los avances que hubo” debido a las políticas oficiales.
Por su parte, Giustiniani dijo: “Existe un PS que es alternativa para millones de argentinos. Saludo la ratificación de este Congreso, de una política que en los últimos años se ha manifestado exitosa”, enfatizó.
Esa visión “alternativa” al kircherismo quedó explicitada en el documento, que resaltó que “la misión estratégica del PS es unir a todas las fuerzas sociales y políticas de centro izquierda en un espacio alternativo al oficialismo”.
En ese contexto, el sector del socialismo porteño que encabeza el diputado Raúl Puy, evaluó la necesidad de sentarse a dialogar con otros sectores de la fuerza que no están de acuerdo con la continuidad al frente del PS de Giustiniani, y de esta manera presentar listas para los comicios internos para la elección de cargos ejecutivos en el partido.
De aquí en más, los distintos sectores del socialismo se centrarán en conformar las listas con aspirantes a conducir la fuerza.
Por un lado, el propio Giustiniani, quien buscará seguir al frente del partido, y por otro, los bonaerenses, que no descartaron presentar una lista propia y que ya obtuvieron el compromiso de Binner de no presentarse como alternativa a la conducción.
Los distintos sectores, en todo caso, tendrán tiempo hasta el 8 de abril para confeccionar las listas, en tanto que la votación de autoridades tendrá lugar dos meses después, el 8 de junio.
