Todo el arco opositor legislativo coincidió en cuestionar la fuerte réplica de Cristina Fernández al campo. Hablan de "sordera y soberbia".
Diputados del radicalismo, el PRO y la Coalición Cívica presentaron un proyecto en el Congreso reclamando que el Gobierno dé marcha atrás con el aumento de las retenciones, factor desencadenante del fuerte paro del campo que lleva más de diez días.
En ese marco, el titular del bloque macrista de la Cámara baja, Federico Pinedo, reclamó que prime el diálogo entre las partes y advirtió que hasta ahora el Gobierno ha optado por el camino inverso.
El diputado Pinedo dijo haber visto "un gobierno sordo, incomprensivo y soberbio", y se quejó porque "esto agrede a la gente que está en la calle y lamentablemente dificulta la única salida razonable para este conflicto que es el diálogo para tener un plan estable de política agropecuaria, con reglas que se respeten".
Desde el radicalismo, su titular, el senador Gerardo Morales, y los presidentes de los bloques parlamentarios de ambas cámaras, Ernesto Sanz (Senado) y Oscar Aguad (Diputados), dijeron que "una vez más, el mensaje de la Presidenta estuvo cargado de prepotencia y provocación".
Advirtieron que "una vez más, se eligió el peligroso y delgado sendero de confrontar argentinos contra argentinos".
"La enorme expectativa de toda la sociedad argentina ante las palabras de la Presidenta reflejaba la esperanza de un atisbo de solución al conflicto del campo (pero) lamentablemente, Cristina Kirchner contestó con el estilo autoritario de siempre, al que nos tiene acostumbrados", señalaron los legisladores radicales, para quienes "tras su discurso de confrontación, Cristina Kirchner es la única responsable de los posibles conflictos que se generen en la rutas y el desabastecimiento. De eso deberá hacerse cargo".
Por su parte, el bloque de diputados nacionales de la Coalición Cívica manifestó su repudio al discurso pronunciado por la Presidenta de la Nación, al que calificó de "mentiroso, irresponsable y que tiende a la división del país".
"La Presidenta de la Nación agravó el conflicto agropecuario con un discurso provocador, irresponsable y que tiende a la división del país", señaló la bancada opositora a través de su presidente, Adrián Pérez (ARI-Buenos Aires). "En lugar de llamar al diálogo y al consenso, Cristina Kirchner volvió a agredir a los productores, sin plantear soluciones a un conflicto que afecta al conjunto de la sociedad", dijo.
"No hay ningún paso de comedia ni piquete de la abundancia, como dice la Presidenta: hay un reclamo legítimo de un sector que ve afectada su supervivencia por la falta de políticas de largo plazo y la continuidad de medidas que perjudican a los pequeños y medianos productores y concentran la tierra en manos de los grandes exportadores", cuestionó Pérez
Por su lado, el bloque de diputados nacionales del ARI Autónomo 8+, señaló a través de su titular, Eduardo Macaluse, que Cristina "ya que se tomó tanto tiempo para abrir la boca, tendría que haber sido más prudente".
Advirtió que ella "tiene que tomar nota que es la Presidenta y no puede seguir hablando como una senadora. Lo que hace falta en este conflicto es una dosis de razonabilidad y sentarse a escuchar".
"Este conflicto no tiene solución mientras haya una lectura binaria y maniquea", agregó el diputado Macaluse.