El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, afirmó que su administración “está finalizando con una etapa del pasado cargada de inacción, ineficacia y corruptela”, durante un acto en el que presentó las acciones realizadas en los primeros cien días de gestión.

El mandatario comunal hizo un resumen de las principales medidas, se dirigió a “gremios, empleados de la Ciudad, proveedores, contratistas y los vecinos”, y calificó a su gobierno como “el primer paso en la enorme transformación de la Ciudad”.

El discurso entusiasta presentado por Macri contrastó con la visión de la oposición porteña, que cuestionó a coro el aumento del ABL y de las patentes, los modestos avances de las promesas de campaña y el empantanado proceso de traspaso de la Policía a la órbita comunal.

Macri prometió “dar batalla a aquellos que creen que el empleo público es una beca” y dijo que pese a que “tenemos problemas, se puede, y todo tiene solución. Debemos ser muy austeros a la hora de manejar los recursos, que son escasos”.

El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hizo estas declaraciones al encabezar la ceremonia en el Museo Benito Quinquela Martín, en el barrio de La Boca, donde estuvo acompañado por todo su gabinete.

Macri insistió con la proyección de un video previo a la presentación -que en la apertura de sesiones de la Legislatura le valió críticas de todos los sectores- y habló de su “entusiasmo” personal y el de su equipo por continuar trabajando.
El mandatario comunal admitió que si bien “hemos hecho muchísimas cosas”, fueron “muchas menos seguramente de las que hubiésemos querido y nada en comparación a lo que tenemos que hacer”.

“La tarea es enorme, es un cambio cultural que involucra mucho esfuerzo de todas las partes”, subrayó, y sostuvo que en los primeros meses “han sido el primero paso de una enorme transformación que ha comenzado y que confiamos en que se profundice”.
Macri se manifestó convencido de que “estamos finalizando con una etapa del pasado cargada de inacción, de ineficacia, de corruptela, que llevó a generar una enorme cantidad de problemas en nuestra sociedad, acá, en la ciudad de Buenos Aires, que son similares a los que uno encuentra en muchas partes del país”.

Para el jefe del Ejecutivo capitalino, desde su asunción hasta hoy “le hemos podido transmitir a la comunidad hacia dónde vamos y qué es lo que queremos. Como diríamos en términos futbolísticos -resaltó- hemos podido marcar la cancha”.

Meses después del duro enfrentamiento que mantuvo con el sindicato de los empleados municipales por su decisión de no renovar el contrato a unos 2 mil trabajadores, Macri consideró que “al gremio le ha quedado claro que para nosotros no es negociable recuperar la carrera pública o que todos se tienen que capacitar”.

“Para eso tenemos que cuidar a nuestros empleados y darles una buena atención, por eso necesitamos una obra social con un servicio de calidad”, añadió.

Macri prosiguió en su alocución: “A los empleados les ha quedado claro que nosotros estamos para premiar, reconocer el trabajo de aquellos que se esfuerzan y quieren recuperar la calidad del servicio público”.

Sobre este punto, el ex presidente de Boca prometió “dar batalla a aquellos que crean que el empleo público es una beca, una beca que no nos obliga a ninguna tarea, ni a escuchar ni a servir a los vecinos de esta ciudad”.