El presidente de Diputados, Eduardo Fellner; la vicepresidenta 1º del Cuerpo, Patricia Vaca Narvaja; y el jefe de bloque oficialista en el Senado, Miguel Angel Pichetto, respaldaron al titular del bloque kirchnerista de Diputados.
Diputados y senadores nacionales repudiaron el ataque sufrido por el jefe de la bancada del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, en Rosario y acusaron a los agresores de ser “incapaces de convivir en democracia y resolver los problemas mediante el diálogo civilizado”.
El presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Fellner, se solidarizó con Rossi y sostuvo que “se deben aceptar los disensos y aprender a convivir en términos democráticos”, al considerar que se trata de dirigentes que “practican la intemperancia y no respetan las políticas votadas por la gente”.
Rossi denunció en un comunicado haber sido víctima ayer, en su domicilio de Rosario y en presencia de su familia, de una “incalificable agresión personal de parte de un grupo de personas encabezadas por el presidente y el vice de la Sociedad Rural de Rosario, Jorge Ugolini y Miguel Calvo”.
Tras cuestionar esa actitud, Fellner consideró que “son momentos en los que debe imperar el diálogo y la mesura”, al repudiar las agresiones de la que fueron objeto el legislador y su familia que, dijo, “no tienen por qué sufrir estas situaciones porque el diputado exprese libremente sus opiniones”.
También, la mesa de conducción del bloque de diputados del Frente para la Victoria repudió la actitud de los agresores que, dijeron, “demostraron una vez más su incapacidad de convivir en democracia y resolver mediante el diálogo civilizado sus pretensiones sectoriales”.
En un comunicado de prensa, los legisladores consideraron que este tipo de episodios “revelan el carácter sectario y antidemocrático de quiénes defienden los intereses del sector más concentrado y rentable de la producción agraria que no mide las consecuencias ni perjuicios en las metodologías que utiliza”.
A su turno, el titular del bloque de senadores del Frente para la Victoria, Miguel Pichetto, calificó de “fascista” el ataque sufrido por Rossi y consideró como “gravísima la actitud” del presidente y del vicepresidente de la Sociedad Rural rosarina, Jorge Ugolini y Miguel Calvo, que lideraron la agresión.
“El único pecado de Rossi ha sido defender la política impositiva del gobierno nacional”, sostuvo Pichetto.
Asimismo, la vicepresidenta primera de la Cámara de Diputados, Patricia Vaca Narvaja, calificó de “sectario y autoritario” el escrache y sostuvo que esa agresión “revela que subsisten en nuestra sociedad signos inequívocos de sectarismo y autoritarismo”.
Vaca Narvaja dijo que el escrache fue realizado por “grupos de personas que pertenecen a los sectores sociales más beneficiados por el presente modelo económico quiénes, en pos de intereses sectoriales, no dudan en recurrir a la violencia como método de acción política”.
“El gobierno nacional considera que la posibilidad de crear un modelo de desarrollo nacional sustentable exige el compromiso de todos los sectores productivos, pero frente a sus propuestas, hasta ahora sólo ha recibido de la entidades que dicen representar al campo, respuestas interesadas”, señaló Vaca Narvaja.
En tanto, concejales de los bloques del Frente para la Victoria, Encuentro por Rosario y del Partido del Progreso Social repudiaron la “agresión” contra Rossi y consideraron que esa actitud “no es compatible con el estado de derecho”.
Los concejales Arturo Gandolla, Osvaldo Miatello, Miriam Abt, Luisa Donni, María Eugenia Bielsa, Fernando Rosua y Alfredo Curi advirtieron que “curiosamente en lugar de debatir y disentir democráticamente” la Sociedad Rural “apela a este tipo de apriete en defensa de su bolsillo”.
Por su parte, la seccional Rosario del Sindicato de Amas de Casa de la República Argentina (Sacra) repudió la agresión contra Rossi y su familia de parte de integrantes de la Sociedad Rural Argentina, “quiénes maltrataron verbal y psicológicamente al legislador en su domicilio”.
La agresión contra Rossi fue repudiada además por la seccional Rosario del Sindicato de Amas de Casa de la República Argentina (Sacra), el Movimiento Evita y Confluencia Santafesina.
