Los senadores nacionales aprobaron la designación de Juliana Marino como embajadora en Cuba, como así también la designación de Carlos Antonio Pérez como director del Banco Central.

La designación de Marino contó con el voto en contra de las senadoras Liliana Negre de Alonso y Delia Pinchetti de Sierra Morales, ambas por el mismo motivo, que fue expuesto por la puntana, quien señaló que la designación de la ex diputada afectaba sus convicciones personales. La referencia de ambas senadoras tiene que ver sin dudas con la postura favorable al aborto que siempre ha mantenido la ex legisladora y flamante embajadora.

A su vez, el bloque de la Coalición Cívica, integrado por los senadores Samuel Cabanchik y María Eugenia Estenssoro, anunció su abstención. El primero aclaró que no había ninguna objeción con la figura de Juliana Marino, pero aclaró que pretendían que “el servicio exterior sea reforzado”, como así también que “los nombramientos políticos vuelvan a ser una excepción y no la regla”.

Además, advirtieron que el tema Cuba es un tema “especialmente sensible” y citaron en tal sentido la situación de la doctora Molina, cuya salida de la isla para venir a la Argentina, donde reside su hijo, no es permitida por las autoridades caribeñas.

Asimismo el Cuerpo aprobó las designaciones de un juez y cuatro integrantes del Ministerio Público.