Los impensados brotes de rebelión en el seno del bloque de diputados del Frente para la Victoria que lidera Agustín Rossi, como así también de los aliados como los radicales K, genera más de una chanza entre varones y mujeres de los mismos.

Mientras el ex gobernador bonaerense y actual diputado nacional Felipe Solá se regodea en afirmar que él fue el primero que marcó las disidencias con el Gobierno, otros desde el costado humorístico comenzaron a disentir con la política oficial. La frase más escuchada y festejada de los diputados del FpV en estos días es: “Estamos indigestos de comer batracios”, en clara alusión a la obediencia debida que rige en la tropa K

Sin lugar a dudas esta situación lleva a Rossi a armonizar posiciones para evitar una crisis que afecte la unidad del bloque y fundamentalmente que nadie de un portazo.