Alfredo De Angeli le dio pasto a las fieras cuando deslizó aquello de que el kilo de lomo debería costar 80 pesos. A partir de entonces el kirchnerismo encontró nuevos elementos para cuestionar los argumentos del campo y es lo que hicieron dirigentes de la Juventud Peronista y la agrupación La Cámpora, que encabezaron un escrache en la sede de la Federación Agraria en esta capital.

El legislador porteño Juan Cabandié fue la cara visible del escrache que, en realidad, tuvo por objeto “repudiar los escraches de los ruralistas a los legisladores oficialistas”.

Aclaró en tal sentido que no iban a la casa de De Angeli, sino que protestaban en “su lugar de trabajo”. También advirtieron que “la Federación Agraria se subió por izquierda y se bajó por derecha, junto a Luis Barrionuevo”.

Cabandié dijo que “queremos más democracia”, y que “los argentinos no van a permitir que sus mesas se desabastezcan por un grupo antidemocrático como es la Federación Agraria”.

“Violencia es cortar rutas”, dijo el legislador en lo que aparenta ser un discurso bien estudiado, por cuanto son las mismas palabras que usó el día anterior el diputado Edgardo Depetri.

Una de las manifestantes, disfrazada de vaca, dijo que “esta es una protesta pacífica” y remarcó el “apoyo al movimiento nacionalo y popular”.

En forma irónica, los manifestantes pegaron carteles en las puertas de la Federación Agraria con una foto de De Angeli y la leyenda “por el lomo a 80 pesos, todos con Alfredito”.