Catamarca fue la primera provincia cuyo gobernador radical K se distanció del Gobierno nacional. El principal referente legislativo de Eduardo Brizuela del Moral formuló ante Parlamentario duras críticas sobre la “discriminación” del Gobierno central hacia esE distrito y se quejó por la “falta de lealtad política” del kirchnerismo.
El diputado Genaro Collantes es el principal referente del gobernador catamarqueño en el Congreso nacional. Y como tal, no tiene empacho en expresar el disgusto que le causan al Gobierno provincial los “incumplimientos” del Ejecutivo nacional en materia de acuerdos preexistentes. Incumplimientos que no lo sorprenden, por cuanto son parte de una relación que supo ser fluida, al punto tal de haber formado parte el Gobierno catamarqueño de la Concertación, pero que hoy está rota.
Tan es así que la inauguración de una obra reciente que concierne a Catamarca se hizo fuera de los límites provinciales y sin invitar al gobernador.
- Usted puntualmente habla de la “discriminación K”.
- Yo creo que hay una gran dosis de soberbia, en el desconocimiento institucional de la figura de un representante de una provincia como en este caso el gobernador. Tanto que se habla del interior profundo… No quiero cargarle las tintas a la figura de la Presidenta, pero el Ministerio del Interior, Protocolo, ¿cómo puede ser que se anuncie una obra que es exclusivamente hecha en territorio catamarqueño, olvidándose del gobernador? Y que se lo haga en una ciudad limítrofe, a escasos metros de la provincia de Catamarca.
Collantes habla de la licitación del dique El Bolsón, cuyo acto se realizó en Frías, una ciudad santiagueña cuyo intendente es del Frente para la Victoria, y que está separada de Catamarca por el ferrocarril. Pero cita otros factores, que adjudica al distanciamiento que el gobernador ha marcado políticamente con el Gobierno nacional, sobre todo en los últimos tiempos con el conflicto del campo, pero que “ya venían con antecedentes”. Y se quejó ante Parlamentario por otras situaciones de mora que se dan con los fondos de vivienda, los de Coparticipación Federal y los que tienen que ver con obras de caminos.
- Es una decisión política electoral que tiene que ver con 2009. En Catamarca las elecciones provinciales se hacen normalmente, tal cual lo establece la Constitución, en el mes de marzo, y marzo está a la vuelta de la esquina. Obviamente hay un acuerdo político cerrado entre (la vicegobernadora) Lucía Corpaci, que es auspiciada por Armando “Bombón” Mercado, ex cuñado del presidente Néstor Kirchner. Ella es sobrina de Mercado… es Lucía Corpaci Saadi de Mercado. Obviamente esto habla de un acuerdo electoral político, y de discriminación directa y franca, tan es así que los fondos nacionales que corresponde que sean bajados por el Ejecutivo al Gobierno de la provincia, son direccionados a la vicegobernadora. Y la presencia institucional de la vicegobernadora en el acto ese en Frías, lo está marcando.
- Ustedes fueron de los primeros que adhirieron a la Concertación. ¿En qué momento se produce el desencanto?
- El distanciamiento fue paulatino. No fue un hecho solo, primero comenzó con los reclamos, ninguno ha sido atendido. Actualmente la deuda es calculada por los organismos afectados que están haciendo el reclamo administrativo, en alrededor de 150 millones de pesos, que para Catamarca es una cifra astronómica. Las moras tienen que ver con acciones que el Gobierno nacional había acordado, por ejemplo planes de vivienda, cuya demora viene de agosto del año pasado. Todos estos hechos políticos fueron de alguna manera produciendo este distanciamiento. Y hubo un crack clave, que fue la deslealtad total del Frente para la Victoria en relación a una decisión política que tomaron, no obstante que ya había antecedentes. ¿Cuál fue? La Cámara de Diputados tiene 41 componentes; en el listado del Frente Cívico y Social fueron tres diputados en la lista sábana pertenecientes al Frente para la Victoria. ¿Qué hicieron esos tres diputados? Se aliaron a la oposición y se llevaron la Cámara de Diputados de la Provincia. Con esos tres diputados manejados obviamente por Mercado… Y en esa oportunidad hicieron un acuerdo con Luis Barrionuevo y con todos los sectores del peronismo, incluido el de Saadi. Entonces los 18 diputados peronistas desperdigados de distintos sectores se sumaron a estos tres del FpV que venían en nuestra boleta, se pasaron para el otro lado y se llevaron la Cámara de Diputados. Eso produjo el crack. La Cámara quedó en manos de un hombre pariente de Saadi, un médico llamado Oscar Brizuela. Obviamente esto empezó a generar situaciones de conflicto con el Gobierno en sí, porque empezaron a desfilar los miembros del Ejecutivo, comenzaron a hacer acciones políticas a partir de la Cámara baja.
- Todo esto sucedió con Cristina en el poder. ¿Anteriormente Néstor había cumplido?
- Recién le decía de los antecedentes, en Catamarca se hizo en 2003, en esa época gobernaba Oscar Castillo, pero había una relación importante con Néstor Kirchner, entonces presidente. Y en esa oportunidad se hizo un acuerdo y el primer diputado nacional de la boleta del Frente Cívico fue un hombre pedido por el Presidente. Pero ese diputado nacional jamás formó parte del Frente Cívico. Bueno, pasó, porque no tiene trascendencia. En 2005 hay una nueva elección en donde se logra un nuevo entendimiento con el Frente para la Victoria y vienen dos diputados provinciales en la boleta del Frente Cívico. Una, sobrina de Mercado. ¿Qué hicieron? Antes de asumir ya habían formado bloque aparte. O sea que ya vienen con antecedentes de falta de lealtad política.
- No tienen de qué sorprenderse entonces…
- No nos extraña, pero ya al entrar en juego recursos que tienen que ver con la acción de Gobierno y demás, la cosa empezó a distanciarse cada vez más.
- ¿Cómo ven el Gobierno de Cristina? ¿También los defraudó? Ya no a nivel de los recursos que les retacean, sino de las expectativas que tenían en ella.
- Creo que el enfoque que se está haciendo es autoritario, demasiado parcial, yo diría hasta de ceguera política. ¡Son los dueños de la verdad!… El no admitir el disenso o a quien opina diferente, creo que es un gran déficit para cualquier Gobierno. Y obviamente queda la sensación de que hay un Ejecutivo manejado por una sociedad, no por una persona.
- ¿Esto no lo veían venir ustedes?
- Nosotros siempre pensamos en positivo. Pero es un estilo de Gobierno que está de alguna manera perdiendo oportunidades. Aunque tiene legitimidad política, ha sido elegido por la mayoría y calculamos que debe corregir el rumbo y llegar a culminar su mandato.
- Manteniendo esa estructura del Frente Cívico que les ha dado buenos resultados, ¿están pensando en una reinserción en lo que es la Unión Cívica Radical?
- Sí, sí. Nosotros vamos a trabajar dentro de la orgánica radical. El distrito no fue sancionado y siempre tuvimos buen diálogo, más allá de nuestros distintos puntos de vista, e incluso en la época en que Roberto Iglesias era presidente de la UCR, conversó con el gobernador, fue varias veces a Catamarca. Lo mismo el presidente de la Convención nacional, Adolfo Stubrin; el gobernador tiene conversaciones con Gerardo Morales, con quien Brizuela ha sido colega en el Senado. De manera que siempre han tenido una buena imagen de la mesura y del equilibrio y de la prudencia de Brizuela en el manejo político de la situación. Como distrito, se trabaja fortaleciendo el radicalismo, que tuvo una expresión interna hace muy poquito donde fue reelecto Brizuela del Moral como presidente del partido. Y bueno, vamos a trabajar orgánicamente con el radicalismo a nivel nacional pensando que se debe construir un radicalismo amplio, abarcativo, que debe superar situaciones de conflicto y se debe transformar en una alternativa de alternancia democrática en el país.
- ¿Y qué rol debe jugar Cobos en ese radicalismo?
- El debe cumplir su rol institucional como vicepresidente. Creo que es un hombre valioso, porque tuvo una actitud importante para el país, que sirvió para muchas cosas en positivo, con un reconocimiento claro de la sociedad. Ahora, dentro de lo partidario, tendrá que darse el debate para ver qué actitud se toma hacia delante, no solamente con él, sino con todos los que han pensado distinto. Lo que pasa es que creo que todo esto se inicia a partir de una falta de autocrítica después del fracaso del Gobierno de la Alianza. Faltó autocrítica, faltó sinceramiento, después vino la crisis de la candidatura a presidente de Leopoldo Moreau. Nosotros tenemos sobrados antecedentes de haber trabajado a la par del radicalismo en las buenas y las malas.
- Usted habló de las cosas que lo distanciaron del kirchnerismo; ¿qué fue lo que los acercó?
- Lo institucional, porque siempre se plantearon las posibilidades de trabajar en conjunto con acciones que fueran en beneficio de los catamarqueños. Esa fue la idea central. Obviamente ese tipo de cosas no se cumplieron, siempre fueron marcadas las pertenencias partidarias. La Concertación en Catamarca no existe y no hay posibilidad de revertir la situación.
- ¿Y la Concertación a nivel nacional?
- Tampoco.
- ¿Existió alguna vez como tal, durante el Gobierno de Cristina?
- Creo que fue un cúmulo de buenas intenciones, pero cuando aparecieron los verdaderos intereses que movían esta Concertación, quedó al descubierto que no tenía un asidero, no había firmeza y obviamente cuando llegaron los momentos difíciles, de diferencias, ahí entró la crisis. Yo creo que ese modelo ya no está presente, o por lo menos tiene una gran crisis de la que no se cómo va a salir.
- Usted hablaba de que Cristina tiene que terminar su mandato y le quedan tres años a ella y a cada gobernador. ¿Cómo cree que serán estos años para su gobernador, con una relación tan tirante con el Gobierno nacional, teniendo en cuenta que las provincias están dependiendo tanto del poder central?
- Argentina, a partir de la modificación de la Constitución del año 94, pierde la esencia federal. Porque queda prácticamente sin representación en cuanto a la posibilidad de incidir en el contexto político nacional. Nosotros, electoralmente hablando, somos numéricamente menos que dos barrios de La Matanza, entonces no tenemos significación electoral. Creo que esto se tiene que revertir, primero con un federalismo en serio, no un enunciado, un discursivo… Hablar de “un interior profundo…” y le damos a quien nos place, o a quien nos resulta más simpático o a quien acompaña las políticas que nosotros estamos marcando… Yo creo que esto se tiene que corregir con una verdadera ley de Coparticipación Federal, que es una materia pendiente del Congreso que alguna vez la tendrá que tomar.
- Usted citó que dos barrios de La Matanza equivalen a un Catamarca. ¿Cómo ven desde el interior que casi todas las inauguraciones de obras las hace la Presidenta en el conurbano?
- Tiene que ver con lo mismo. Si hay una infraestructura, va al conurbano, si hay una actividad deportiva, va ahí… Todo este tipo de situaciones tiene que ver con el peso electoral que tiene cada distrito y a partir de ahí se marcan las diferencias. Y si hay un distrito que es adverso en lo político, peor… Creo que esas cosas se deben cambiar.
- ¿Van a cambiar?
- Mmmh, esperemos que sí, confiamos que pueda darse. El diálogo en estos momentos es fundamental… y bueno, si no se logra, ya no puede castigarse a una provincia en su conjunto.