El diputado kirchnerista Juan Carlos Díaz Roig había alterado los ánimos de ciertos diputados que podrían tener posturas afines a la del Gobierno en referencia al proyecto de reforma previsional. Es que el titular de la Comisión de Previsión y Seguridad Social había sugerido que el debate estaba agotado y cerrarían el dictamen este mismo martes.

Nada ha cambiado, pues ese sigue siendo el objetivo del oficialismo, pero este mismo martes podrían llegar a atender algunas de las propuestas de la oposición, según confió el propio Díaz Roig.

Ello se verá este martes, cuando a las 15 se reúna nuevamente el plenario de comisiones de Previsión y Seguridad Social y de Presupuesto y Hacienda, para analizar la modificación del Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones.

Al respecto, el diputado formoseño reiteró la postura expresada por estos días por el matrimonio Kirchner, respecto a que el espíritu de la iniciativa es que la administración privada pase al Estado, y no la estatización.

En el mismo sentido, el director ejecutivo de la ANSeS, Amado Boudou, admitió que el Gobierno podría incorporar “alguna cosa” en el proyecto oficial de reforma al sistema previsional privado.

En declaraciones a la prensa, el funcionario dijo estar convencido de que el proyecto enviado por el Gobierno al Congreso “es el mejor”, ya que de lo contrario “no lo hubiéramos enviado”.

“Pero en la discusión estuvimos viendo que está la posibilidad de incorporar alguna cosa”, reconoció el titular de la ANSeS al admitir la posibilidad de incluir cambios al proyecto oficial.

Díaz Roig aseguró que tendrán los votos suficientes para aprobar el proyecto esta semana y aclaró que “como hay propuestas de reformas de artículos puntuales, puede haber un mayor un número de firmas con reservas”.

“Antes del plenario se reunirán los bloques para evaluar los aportes recibidos la semana pasada durante las rondas de consultas y tomar posición”, apuntó además el legislador, admitiendo en tal sentido la posibilidad de aplicar cambios, siempre y cuando –enfatizó- no se altere el espíritu y el fondo de la cuestión.