Tras la visita del secretario de Transporte, Ricardo Jaime, a la Comisión Bicameral de Seguimiento de las Privatizadas que analiza el “rescate” de las empresas aéreas en manos del Grupo Marsans, comenzó a cobrar fuerza la posibilidad de la expropiación.

Para calmar los ánimos, el ministro de Planificación Julio De Vido manifestó: “Somos esclavos de la ley y a ella nos atenemos”. Así volvió a asegurar que el Gobierno nacional es respetuoso del Parlamento.

Estas declaraciones fueron hechas al inaugurar el encuentro de ministros de la Organización Latinoamericana de Energía para América Latina y el Caribe. La oposición continúa esperando al polémico ministro de Planificación y Obras Públicas.

El titular de Planificación aseguró que “no habrá un tercer evaluador de los activos de la compañía”, y recordó: “ayer el Congreso no aprobó la valuación que hizo Credit Suisse, y me parece que viene ahora toda una instancia parlamentaria” En ese sentido insistió: “creo que hay que dejar que actúen las instituciones. Hay 2.200 millones de pesos de diferencia en la valuación” que hace Credit Suisse, a pedido del Grupo Marsans que pretende 540 millones de dólares y la que hizo el Tribunal de Tasación de la Nacion, que fijó un valor negativo de -832 millones de dólares.

De Vido dijo estar “de acuerdo” con lo que planteó ayer el Secretario de Transporte, Ricardo Jaime, ante los legisladores que integran la Comisión Bicameral de Reforma del Estado, cuando dijo que el valor de las acciones de Aerolíneas y Austral “es cero”, y calificó la valuación de Credit Suisse por “inconsistente”.

Lo expresado por Jaime “está perfectamente de acuerdo con lo que yo pienso”, acotó.

De Vido destacó que “mientras tanto, el Gobierno está garantizando el servicio y por supuesto, las fuentes de trabajo”, para lo que ha transferido fondos por 1.065 millones de pesos para mantener el servicio de Aerolíneas y Austral, durante el segundo semestre de 2008.

“Acá no se trata de una discusión contractual”, enfatizó el funcionario. “Cuando una empresa deja de pagar los sueldos, siempre hay que analizar el problema desde donde se parte. Un día antes de empezar las vacaciones de invierno, en junio pasado, ellos (la empresa Marsans) dijeron: los sueldos no los vamos a pagar, y allí empezó todo el conflicto”, recordó.

“Hay mucha intransigencia y poco compromiso de parte de ellos”, afirmó el ministro de Vido en diálogo con la prensa.

Seguidamente agregó: “una cosa es estar discutiendo un contrato, como hemos discutido con otras empresas -Correo Argentino, Aguas argentinas- y otra hacer desaparecer el servicio de un día para otro, servicio que tuvimos que asumir nosotros”, enfatizó.