El festejo de los kirchneristas -en la madrugada del jueves- tras la votación favorable a la eliminación de las AFJP por amplia mayoría, se opacó fugazmente cuando se escuchó en medio de los abrazos y los vítores el grito: “Llamen a la Policía”. Los diputados oficialistas se preguntaban entre ellos qué estaba pasando y a […]
El festejo de los kirchneristas -en la madrugada del jueves- tras la votación favorable a la eliminación de las AFJP por amplia mayoría, se opacó fugazmente cuando se escuchó en medio de los abrazos y los vítores el grito: “Llamen a la Policía”.
Los diputados oficialistas se preguntaban entre ellos qué estaba pasando y a qué se debía el desesperado pedido en medio de la alegría -sin límites- que después prolongaron en los bares de las inmediaciones del Congreso.
La calma y los nervios se aplacaron cuando uno de los legisladores dijo en voz alta: “Tranquilos muchachos, llamen a la Policía por el afano en la votación”, aclaró, lo que acentuó el festejo. No era para menos. El bloque del FpV le estaba ofrendando a la pareja presidencial uno de los grandes trofeos del año.
