La legisladora de la Coalición Cívica Susana García, miembro de la Comisión de Agricultura y Ganadería, manifestó su preocupación ante “la omisión del Estado Nacional en materia de emergencia agropecuaria”.

En este sentido, expresó que “la postergación de las soluciones para los afectados ante situaciones de emergencia por factores climáticos, biológicos, meteorológicos, u otros, implica un desentendimiento por parte de los poderes públicos ante desastres naturales que traen profundas consecuencias productivas y sociales para el país”.

La legisladora de la Coalición Cívica señaló: “Entre las incertidumbres geográficas, el fenómeno de la sequía afecta seriamente a las regiones sin riego y, en muchas ocasiones, también a las que cuentan con él. Estas consecuencias son bien conocidas por el productor, las comunidades del medio rural, los técnicos agropecuarios y por el Estado en todos sus niveles, quien debería planificar en forma integrada las políticas de prevención, control y evaluación del fenómeno”.

Teniendo en cuenta la realidad nacional, García opinó que “los fenómenos naturales devienen en desastres por la consolidación de instituciones débiles, sin independencia, con ausencia de órganos de control, y con una sociedad con bajos niveles de acceso a la educación y con altos índices de pobreza”.
La diputada expresó que “la prolongada sequía que gravita la provincia de Santa Fe es un ejemplo de la urgencia y la necesidad de que se adopten decisiones para resolver y atemperar el fenómeno. La complejidad de la situación muestra que ya no implica sólo un problema económico, de pérdidas de rendimientos, sino también es un problema social y ambiental, determinado por la disponibilidad de las comunidades de servicios básicos como el acceso al agua, energía, transporte, e infraestructura”.

Finalmente, García instó a que el Estado Nacional asuma la responsabilidad: “La mejor forma de prevenir los desastres ambientales, sociales, económicos, u otros, implica en primera instancia que los organismos públicos competentes reconozcan el problema y asuman de una vez por todas la responsabilidad de adoptar las medidas conducentes para resolverlos”.