Febrero sería el mes indicado para poner punto final a un debate de larga data: la despenalización de la droga. El Gobierno nacional está elaborando un proyecto con la tendencia de “no criminalizar al adicto”. La Corte Suprema se expedirá también en ese mes.
El ministro de Justicia, Aníbal Fernández, confirmó que el Gobierno está trabajando en un proyecto de ley para despenalizar el consumo de drogas, de modo de "no criminalizar al adicto", justo cuando la Corte Suprema de Justicia está cerca de pronunciarse sobre el tema.
Fernández sostuvo que, paralelamente a la despenalización de la tenencia de estupefacientes para consumo personal, se requiere implementar "una política despiadada contra el narcotráfico", así como otra "de prevención".
El ministro planteó que la Corte no fallará a favor de la despenalización de la tenencia de droga para el consumo, sino que debe dictar "la inconstitucionalidad del castigo penal a un solo privado" procesado por utilizar narcóticos.
Por ello, el funcionario pidió no usar el término "despenalización", al considerar que "da para cualquier cosa y se dicen tantas estupideces sobre ella que es mejor evitarla" ante la falta de distinción de la ciudadanía de la legalización de la tenencia para consumo personal -que no será punible- del tráfico de drogas, que sí lo será.
Asimismo, el ministro reiteró que el Gobierno tiene la intención de "no criminalizar al adicto", para lo cual elabora un proyecto de ley al respecto, que de concretarse deberá tratarse en el Congreso de la Nación, donde ya existen varias iniciativas relacionadas al consumo de estupefacientes. Lo más probable es que se trate en extraordinarias, aunque algunos legisladores ya pidieron más tiempo para analizar la situación.
Al respecto, el ministro sostuvo que la Ley de Drogas de 1989, que castiga penalmente tanto la venta como el consumo, "es una norma represiva, con resultados de fracaso" especialmente en materia de salud.
"Estamos trabajando para confluir en un proyecto que ya hemos explicado en Viena", donde este año se desarrolló la 51 sesión extraordinaria del Consejo Económico y Social de la ONU, precisó el ministro.
Fernández fue el encargado de impulsar desde el Ejecutivo el tema de la legalización del consumo, luego de recibir el visto bueno de la presidenta Cristina Kirchner, a pesar de algunos cuestionamientos del titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), José Ramón Granero.
Además, desde distintos sectores del arco político y social se produjeron fuertes críticas al proyecto de despenalización de Fernández, tanto por la posibilidad de que se produzca un aumento en el número de adictos como por la falta de campañas preventivas simultáneas para frenar el ingreso de los adolescentes a las drogas.