La cartera que encabeza Carlos Tomada publicó la reglamentación de la norma que establece una moratoria fiscal para regularizar trabajadores en negro.
Una parte del paquete anticrisis aprobado a fines del año pasado acaba de ser reglamentada. Se trata del blanqueo de hasta diez trabajadores contratados en negro, dispuesto por la controvertida ley que incluía además el controvertido blanqueo de capitales.
Esa parte aún espera para su reglamentación, pero la que tiene que ver con la moratoria fiscal para pequeñas y medianas empresas, fue publicada en el Boletín Oficial.
La norma original establece que las Pyme que se sumen al beneficio quedarán liberadas de multas y punitorios, pero deberán mantener las plantillas declaradas por al menos dos años. Su artículo 8 dice que “cuando, con posterioridad al otorgamiento del beneficio, la planta quedase disminuida, el empleador dentro de los 90 días procederá a la integración de aquella mediante nuevas contrataciones, como condición para continuar manteniendo el beneficio”.
La reglamentación establece que tampoco podrán tomarse como parte de la planta de la empresa a los trabajadores contratados en forma temporaria. Además, el empleador deberá presentar una declaración jurada y presentarse ante la oficina de las autoridades laborales donde se tramiten las penalidades y multas que tuviere por las irregularidades.
Los trabajadores regularizados podrán contar con beneficios de seguridad social y podrán computar hasta 60 meses de aportes previsionales para tener en cuenta a la hora de solicitar la jubilación.
Asimismo se establece que los beneficios para las empresas no estarán vigentes hasta tanto la empresa no cumpla con el blanqueo de la totalidad de los trabajadores que va a declarar como empleados.
