Arranca febrero y este mes debe definirse una cuestión fundamental en materia electoral para la ciudad: si los comicios del distrito se realizan al mismo tiempo que los nacionales.
El macrismo se abocará de lleno a partir de esta semana a definir si las elecciones legislativas en la Ciudad se realizan en forma conjunta con las de la Nación o no.
Si bien la Carta Magna porteña dispone que las mismas se hagan de manera desdoblada, todavía persisten las diferencias y hay serias diferencias en el seno del propio macrismo en la materia. Mientras algunos desean que las dos elecciones sean en forma conjunta, con Gabriela Michetti como candidata que arrastre a las dos listas, otros consideran que hay que desdoblarla, de modo de consolidar la gestión en la Ciudad a través de una buena elección en la que se limite el debate a un nivel local y no se mezcle con temas nacionales.
Cabe consignar que amé del objetivo de lograr una buena elección nacional, de modo de consolidar las expectativas para 2011 y lograr una mayor cantidad de diputados en el Congreso de la Nación, lo que más necesita Mauricio Macri es consolidar su tropa en la Legislatura porteña, donde ya se le hace difícil la aprobación de los temas más ríspidos, como sucedió con el Presupuesto el año pasado, donde el gobierno debió realizar muchas modificaciones para conseguir finalmente su aprobación.
En la actualidad, el bloque del PRO cuenta con 26 escaños, de los cuáles 12 se pondrán en juego en los próximos comicios legislativos.
La intención de algunos legisladores se enfoca a conseguir, con elecciones separadas, al menos 16 diputados para el bloque macrista, lo cual les permitiría estar por sobre los 31 votos que se requiere como mayoría a la hora de sancionar leyes claves que, oportunamente, llegan desde el Ejecutivo.
