La diputada nacional Norma Morandini presentó un recurso de amparo ante la Justicia Electoral para que se declare la inconstitucionalidad del anticipo de las elecciones por considerar que la medida distorsiona la actividad parlamentaria, impone una nueva excepcionalidad, vulnera la autonomía del Congreso y debilita el sistema democrático.

“Es probable que se interprete mi decisión como una ingenuidad política, pero la prefiero al cinismo con el que aceptamos como destino la ilegalidad y el pragmatismo utilitarista que hizo de las emergencias una normalidad y abrió el camino a la excepcionalidad”, dijo la propia diputada al hacer su presentación. Para ella, “así se gobierna con delegación de facultades, con decretos de necesidad y urgencia y en nombre de las ‘crisis’ se acomodan las leyes a la necesidad de los gobernantes. Nunca con el ‘corset’ constitucional que nos permita, por fin, construir normalidad democrática. Por eso, frente a una ley de “emergencia”, que no tiene antecedentes, recurro a la Justicia Electoral para que, como poder independiente, determine la constitucionalidad de la medida. Un manoseo institucional que al vaciar al Congreso vacía también al sistema que le da fundamento”.

Morandini acotó que “si políticamente mi representación en el Parlamento es una consecuencia de la debacle institucional de 2001, ¿por qué habría de repetir las prácticas y las invocadas ‘reglas del juego’ de la política, si fueron precisamente esos vicios los que pulverizaron los partidos y debilitaron la democracia? Y no hay nada más peligroso que un sistema debilitado para abrirle las puertas al autoritarismo y al caos. Por eso debemos definir claramente a la democracia. No alcanza con no tener a un general en la Presidencia ni con votar cada cuatro años. La democracia es el procedimiento y las normas que sustentan lo que la define: la igualdad ante la ley”.

“No ignoro que la ley de ‘emergencia’ que adelantó el calendario electoral fue aprobada por la mayoría circunstancial del Congreso de la Nación, pero esto no garantiza por sí sólo la constitucionalidad de una norma. Si no definimos de manera clara y contundente que el sistema democrático es el que garantiza los derechos ciudadanos, mal podemos esperar que la ciudadanía reconozca la importancia de vivir en democracia”, concluyó la diputada y periodista Norma Morandini.