Es la crónica de una decisión que se veía venir y que finalmente dejó incumplido el deseo del rossismo santafesino, que buscaba lograr forzar la incorporación de su gente a la lista que armará el senador Carlos Reutemann. Cosa que ya no podrá darse, dado que el Consejo Ejecutivo del justicialismo provincial resolvió que no haya internas, pues no hay tiempo para las mismas. En consecuencia, y tal cual se había adelantado, llamaron a un Congreso partidario para el 18 de abril, oportunidad en la que se votará a mano alzada la lista definitiva para el 28 de junio.

Si como todo indica, no hay lista de unidad, será proclamada por mayoría una de las dos listas que se quedará con el sello PJ, o declarar al partido “prescindente” para que se habilite una suerte de neolemas con dos opciones: el Frente Para la Victoria de Rossi y el Frente Santa Fe Federal de Reutemann. En ese caso, ninguna de las dos listas llevará los símbolos del PJ.

Pero para una eventual unificación, Rossi sabe que el problema es él, ya que su nombre es resistido por Reutemann, quien sabe que tras el conflicto con el campo el titular del bloque oficialista de Diputados es un lastre.

El vicepresidente del partido, Jorge Fernández, calificó la medida adoptada por la conducción partidaria como “ilegítima e inválida”. Es que el rossismo, al que Fernández representa, espera un fallo de la Justicia que avale las internas, en cuyo caso ya los reutemistas anticiparon que apelarán la medida. Lo cual, adelantadas las elecciones nacionales como están, tornan prácticamente irreversible la situación.

Es que si hubiera internas, las mismas deberían realizarse antes del 6 de abril, ya que el 9 de mayo vence el plazo de presentación de listas y de registro de candidatos.