Luego del secuestro del auto de la diputada Patricia Bullrich por no pasar el test de alcoholemia, la Ciudad reveló que la legisladora amenazó al personal que le hizo el test.
El ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Guillermo Montenegro, advirtió que la legisladora de la Colación Cívica (CC) Patricia Bullrich se negó a realizar el test de alcoholemia y hasta amenazó a los funcionarios públicos que realizaban los controles.
En diálogo con Radio 10, el funcionario porteño rechazó la versión de la diputada, a quien esta madrugada se le secuestró el vehículo por manejar alcoholizada.
“El primer test da positivo y luego ella empieza a soplar para adentro y hubo que hacerle como siete u ocho veces el control hasta que se le dice que soplara o se le secuestraba el auto por la negativa. Ese es el momento donde sopla correctamente y dio 0,66, que es positivo, y es más que una copita de vino malo”, detalló Montenegro.
Advirtió, además, que Bullrich no sólo se negó, sino que también amenazó a los funcionarios de la Ciudad que aplicaban los controles. “Sopló entre improperios. Amenazó a los empleados”, denunció.
El ministro porteño también criticó a la dirigente de la CC por cuestionar la intencionalidad de los controles de alcoholemia que realiza el gobierno de la Ciudad. “Me parece de muy mala fe poner en duda los controles -replicó-. No hubo funcionarios en el lugar, no es el estilo. Si le da positivo, tiene que bancársela”.
