El senador nacional Arturo Vera dijo que “el Gobierno pretende suplir el desfinanciamiento del Estado con anuncios de obras en inicio de ejecución o nuevas, pero de tan mala calidad por no seguir las técnicas de la construcción que terminan siendo una simple simulación”.

El legislador entrerriano señaló particularmente a los caminos, razón por la cual consideró que esas obras “se convierten en vulgares elementos de engaño electoral para la ciudadanía y malgasto de los dineros públicos, pues esas obras pasadas las elecciones rápidamente se deterioran y destruyen”.

Vera aseguró que “se ve en las repavimentaciones o los nuevos caminos enripiados que por ejemplo las carpetas asfálticas colocadas en muy poco tiempo y en algunos casos en menos del transcurso de un año se deterioran al punto de transformarse en verdaderas trampas para los conductores que lo que menos piensan es que una obra reciente pueda estar con baches”.

“En cuanto a los ripios, es una práctica electoralista de los gobiernos justicialistas realizar principios de ejecución de nuevos enripiados que abarcan entre los 3 km o en algunos raros casos hasta 10km, siempre hechos con el objeto de ilusionar al electorado previo a cada acto eleccionario, obras que al no cumplir con las normas de la construcción rápidamente desaparecen volviéndose nuevamente intransitables en días de lluvia”, agregó. Vera señaló como ejemplos los casos ocurridos en el departamento Federal con el acceso a la Colonia San Lorenzo desde la ruta nacional 127; de la ruta provincial N°5 que une Federal con La Paz, que iniciada hace 22 años lleva 15km enripiados con pequeños avances ocurridos en para cada elección y que en casi todo el recorrido el ripio se halla totalmente contaminado y en muchos tramos intransitables.

Igual ocurre -aseguró- con el ripio de la ruta prov. N°20 -Federal hacia el norte- que con motivo de anteriores elecciones se han hecho 5 o 6 km, cuya extensión es prácticamente intransitable en días de lluvia, pues aunque reciente el enripiado esta contaminado y pantanoso.

El legislador nacional argumentó que “esto genera un doble perjuicio, por un lado inversión de recursos que siempre son escasos en el Estado, que se vuelven casi inútiles y por el otro, engaño y frustración a la ciudadanía que cuando ve las obras las considera inicialmente beneficiosas pero rápidamente advierte su error en la apreciación, sumando un nuevo desengaño a los ya muy repetidos”.

Vera advirtió que “más allá de lo anecdótico que encierra lo expresado anteriormente, la situación muestra una visión preocupante de la política, que poco tiene que ver con el deber ser y sí mucho con la demagogia, el engaño, el ilusionismo, en última instancia la búsqueda del apoyo electoral a cualquier precio aún dilapidando los recursos públicos que trabajosamente la sociedad ingresa al estado por el pago de impuestos y contribuciones, sumando frustración respecto a la gestión pública, arriesgando de este modo la estabilidad del sistema pues muchas veces la sociedad desencantada termina descreyendo en la democracia y de la política como una de sus herramientas fundamentales”.