Fiel a su estilo, el ex presidente Néstor Kirchner cerró su campaña electoral en el Mercado Central con fuertes críticas a sus adversarios y la reivindicación de la gestión de su esposa y la propia.

Su mensaje arrancó con la victimización de la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, “atacada desde el primer minuto”, según sus palabras, por quienes no perdonan ni aceptan el modelo de redistribución en marcha.

En muchos pasajes sacó a la palestra el tema de las privatizaciones vs. estatizaciones, y reivindicó la estatización de los fondos jubilatorios y de Aerolíneas Argentinas. Aunque en ese último caso aclaró que no fue una estatización sino un rescate de una empresa destruida por sus dueños. Rescate llevado a cabo por el Gobierno nacional y los trabajadores, dijo.

Kirchner resaltó el rol del Estado en la economía y la recuperación de empresas.

Una vez más habló del vicepresidente Julio Cobos comparándolo con el papel del vice que él tuvo, el hoy gobernador Daniel Scioli. Le criticó al mendocino que armara “listas opositoras” y buscara “perjudicar la gobernabilidad”, comparándolo con Scioli, a quien destacó por su lealtad y compañerismo”.

Habló de “intentos destituyentes de todo tipo” sufridos por su esposa y la emprendió contra el grupo Clarín, por “describir una realidad completamente distinta”.

Resaltó el proyecto de ley de Medios Audiovisuales y criticó a los medios “acostumbrados a una dirigencia alcahueta que quería que los traten un poquito mejor”.

El ex mandatario dijo una vez más que estará en el Congreso a partir del 10 de diciembre. “Hay mucho aún por hacer y, para eso, iré al Congreso -aseguró-. Les pido que defiendan este proyecto nacional y popular y todo lo logrado. Vienen tiempos de fuerza y de trabajo. El 28 de junio los argentinos seguirán avanzando por la Argentina de la justicia, la equidad, los sueños, la recuperación de la sonrisa”.