No prosperó la acción judicial presentada por el ex legislador macrista y hoy diputado de la oposición Marcelo Meis, quien había cuestionado que la ex vicejefa de Gobierno se hubiera echo presente en actos de gobierno realizados por la administración macrista en la Ciudad.

La mayoría de los integrantes del Tribunal Superior de la Ciudad de Buenos Aires expresaron entre otras cosas que “la alianza imputada (PRO) nunca podría considerarse sujeto activo de la prohibición”.

Agrega el fallo que “una simple consulta de la página web oficial del Gobierno local -a la que el denunciante refiere en relación a parte de la prueba que aporta-, permite verificar que las campañas de publicidad del Gobierno poseen pluralidad de logos, formatos y colores, entre los cuáles es uno más el que aquí se denuncia como excluyente de la propaganda institucional oficial”.

Uno de los magistrados, José Osvaldo Casás, sostuvo que “el color amarillo y las letras negras utilizados en los afiches que reflejan la publicidad de ciertas obras o actuaciones encaradas por el GCBA, por lo demás, ha sido usado con bastante anterioridad a la campaña electoral vinculada al comicio”.

“No puede enrostrarse a las autoridades locales la intención de inducir indubitablemente la voluntad electoral de los vecinos para la referida elección”, puntualizó.