Finalmente la Justicia resolvió mandar a juicio oral al ex presidente Fernando de la Rúa por los hechos que se investigan de principios de esta década en torno al supuesto pago de coimas a senadores nacionales para aprobar la reforma laboral en tiempos de la Alianza.

Así lo adoptó el juez federal Daniel Rafecas, quien remitió la causa al Tribunal Oral Número 3, que será el encargado de juzgar en forma oral al ex mandatario.

De la Rúa no estará solo en el banquillo: también estarán junto a él el ex jefe de la SIDE Fernando de Santibañez y el ex ministro de Trabajo frepasista Alberto Flamarique.

No son los únicos imputados, ya que también figuran en la causa el ex secretario Parlamentario del Senado Mario Pontaquarto, quien se convirtiera en el principal motorizador de la causa, y los ex senadores Alberto Tell, Augusto Alasino, Remo Costanzo y Ricardo Branda, todos ellos justicialistas. Quedó fuera de la causa Emilio Cantarero, cuyos dichos off the record en una nota a La Nación también aportaron a la causa, pero ahora fue declarado inimputable por su estado de salud. Y recordemos que José Genoud, quien fuera titular del bloque radical y presidente provisional del Senado, que murió en septiembre pasado.

En la causa de establece que los senadores habrían recibido la suma de 4.300.000 pesos el 26 de abril de 2000 en el domicilio de Emilio Cantarero, situado en la Avenida Callao 1983, 7 piso de esta ciudad, luego de finalizada la sesión en la que votaron en favor de ley de reforma laboral.

Consultado sobre la resolución judicial, De la Rúa dijo no entender la causa de “tanto escándalo, si esto no cambia nada”, y consideró que se está montando un escándalo nacional con la noticia”.