Los bloqueos instrumentados por el gremio de los camioneros que conduce la familia Moyano desataron la unánime reacción del arco opositor, que habla de ataque a la libertad de expresión y contra la democracia.
El bloqueo de las plantas de distribución de diarios y revistas reiterado a lo largo de esta semana, pero sobre todo en la noche del viernes, desató las reacciones de numerosos legisladores, que fustigaron al Gobierno por su “inacción”.
Para el jefe del radicalismo, el senador Gerardo Morales, se trata de “otra etapa del kirchnerismo explícito”, y remarcó que se trata de “una nueva muestra de la necesidad de control de los medios”.
A juicio del senador jujeño, “esta interferencia en el sistema de distribución de los medios gráficos es la nueva etapa de la vigilancia a los medios de comunicación independientes pretendida por Néstor y Cristina junto a Moyano”.
A su vez, el diputado Francisco de Narváez pidió tener “cuidado” porque “estas bravuconadas pueden hacer tambalear la democracia. Ni la dictadura militar, que llegó a ejercer un poder omnímodo, se atrevió a bloquear la distribución de diarios y revistas. No podemos permitir que ahora lo hagan quienes sólo buscan beneficios personales y muy mezquinos réditos políticos”.
Asimismo anticipó que en la próxima sesión la oposición pedirá informes al Ejecutivo sobre la distribución de diarios y revistas, y rechazó “la situación vivida por la editorial Perfil en las últimas horas, en la ciudad de Buenos Aires”.
Asimismo reclamó “saber cómo la Jefatura de Gabinete y el ministerio del Interior garantizan la libre distribución de los medios gráficos”.
También reaccionó la diputada Patricia Bullrich, para quien “las acciones de apriete como estas se vienen repitiendo. Los graves hechos de coacción forman parte del plan del kirchnerismo para coartar y controlar los medios independientes”.
Por su parte, el diputado del PRO Federico Pinedo, “ninguna cuestión interna de un sindicato puede justificar que se viole la libertad de prensa y el derecho del pueblo a la información”.
El demócrata mendocino Omar De Marchi apuntó a Néstor Kirchner y Hugo Moyano por lo que hacen “contra el Grupo Clarín en particular y contra la prensa en general es de aves de bajo vuelo. Encima, los trabajadores terminan siendo rehenes de una turbia puja de poder”.
“Todo esto forma parte de un plan perfecto del Gobierno para eliminar el pensamiento crítico y la crítica periodística -dijo la presidenta de la Comisión de Libertad de Prensa de la Cámara baja-. Tal como ocurrió en otras oportunidades, se utiliza un reclamo sindical como pantalla. No se puede negar la conexión entre estos hechos y la necesidad del Gobierno de controlar lo que escriben los diarios”.
También el diputado socialista Roy Cortina consideró que “en la Argentina de hoy, teñir un reclamo sindical con impedir la circulación de los diarios es entrar en una zona peligrosa. No es la metodología indicada, ni lo es el tiempo. Cuando venimos de una discusión ríspida como la Ley de Medios, esto no ayuda”.
