En diálogo con Parlamentario, el diputado Fernando Iglesias cuestionó entre otras cosas el impuesto aplicado a los celulares para promover el deporte olímpico.
Por Tomás Aguiar
- ¿Cuál es su opinión acerca de la aprobación de la ley que establece un impuesto a los celulares para promover el deporte nacional?
- Era una ley largamente esperada por el deporte de alto rendimiento argentino, pero la presentada por el oficialismo es una pésima ley, es un verdadero mamarracho jurídico.
- ¿Cuáles son las críticas?
- Por empezar, ni siquiera define el ámbito de aplicación. Se engloba a todos los deportes, o sea se puede gastar en automovilismo, en el fútbol profesional, en el boxeo profesional; debería tener un marco reducido al deporte olímpico, se trata del Comité Olímpico Argentino (COA). Ni siquiera en esto, que es el punto número uno, que es el ámbito de aplicación, lo han pensado.
- ¿Usted está de acuerdo con la financiación?
- Es muy raro que un Gobierno que se la pasa hablando de redistribución de la riqueza saque 200 millones de los bolsillos de los argentinos. Los celulares los utilizan los plomeros, electricistas, albañiles o, los que viven en una villa miseria y no tienen teléfono de línea, para ponérselo en la mano directamente, sin ningún tipo de reglamentación, a un empresario.
- ¿Se refiere a Gerardo Werthein?
- Sí, y no es cualquier empresario, es uno justamente de una compañía de telefonía (Telecom) que va actuar como agente de retención de este dinero. Entonces quién garantiza, que un mes después de recibirlo, estas empresas se los den al Estado en medio de problemas de tarifas o de una devaluación, eso no lo garantiza nadie. Otra vez, con excusas de altos ideales, el kirchnerismo termina enchastrando todo lo que toca.
- ¿Cómo se debería financiar el ente?
- Hay muchísimas posibilidades. Yo tengo veinte años de trabajo en el deporte profesional, he sido entrenador de voleibol aquí en Argentina, en España y en Italia. En este último país, por ejemplo, sale directamente del Toto Calcio, que es como el Prode de acá, hay toda una tradición de financiación a través del juego, pero como él las autoridades del juego son amigos del ex presidente en funciones y ahí no se puede tocar porque hay una trampera, entonces van y le meten la mano a la gente. La verdad que Kirchner es peor que el neoliberalismo, porque en ese caso los privados hacen lo que quieren, pero ahora los privados con la plata del Estado van a hacer lo que ellos se les antoje.
- ¿Propusieron que los fondos surjan de las agencias de juego?
- No saben ni siquiera lo que van a recaudar. Es el uno por ciento o sea que va a depender del consumo de celulares, si anda bien entonces los deportistas argentinos van a andar bien, si baja van a andar mal. Es de una irresponsabilidad absoluta, tendría que ser una suma fija basada en un programa completo donde dijeran en qué van a gastar la plata, porque si mañana el presidente del Comité Olímpico decide que lo importante es organizar el Gran Premio de Fórmula 1, se van a gastar los 200 millones en eso. La ley lo permite, o sea yo no digo que Werthein haga eso, pero la ley no lo tiene que permitir porque no tiene que admitir la discrecionalidad y la arbitrariedad.