Agustín Rossi se mostró dispuesto a dar pelea. En A dos voces le plantearon un terreno resbaladizo, plagado de diputados opositores, aunque aquellos estuvieron en mesas separadas. El santafesino arrancó primero, solitario y marcando el rumbo. Como si fuera el miembro informante de una sesión en la que la oposición iba a cerrar el debate.

Y fiel a su estilo, Rossi se mostró ágil de cintura, combativo, pero -parlamentario al fin- dispuesto a contemporizar, conforme el nuevo panorama del Congreso.

El jefe del bloque oficialista anticipó que en este nuevo Parlamento habrá “iniciativas parlamentarias compartidas”, y sostuvo que su bloque buscará niveles de consenso y de acuerdo con la oposición.

Rossi sostuvo ante los periodistas de TN que “antes, la hegemonía de la iniciativa era nuestra. Este no es el nuevo escenario. Ahora va a haber iniciativas parlamentarias compartidas”.

Más adelante se internó en el territorio de las discrepancias abiertas por la polémica de los vetos que el Gobierno está dispuesto a utilizar contra lo que no le guste de la oposición. Una vez más ahí reiteró que él fue el primero en hablar de esa alternativa, a la que defendió por tratarse de un elemento “constitucional”, y contrarió a sus interlocutores al refutar que se hubiese tratado de “una bravuconada”.

“Fue una reflexión”, aclaró, considerando en cambio un desatino poco feliz las expresiones del radical Oscar Aguad respecto de la posibilidad de que la gente en la calle saliera a resistir los vetos presidenciales.

“Dependerá del grado de responsabilidad de la oposición que nos dejen gobernar”, sintetizó el jefe kirchnerista.