En la 16º edición de los Premios Parlamentario en la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, los primeros lugares fueron ocupados por el futuro presidente de la bancada del Gen, Luis Porfilio Malagamba, y el diputado Carlos Bonicatto, integrante del bloque del FpV/PJ, quien da sus últimos pasos en la Cámara baja luego de cuatro mandatos como tal. Ambos legisladores trazaron ante Parlamentario un balance de sus trabajos legislativos, sopesaron el rol que la Legislatura juega en la era Scioli y abordaron cuestiones políticas en esta nota donde se pueden apreciar los diferentes estilos que desarrollan estos legisladores reconocidos por sus pares, asesores y periodistas especializados que, como es tradicional, participan de la encuesta que realiza Parlamentario año tras año.

– ¿Cuál fue la sensación que experimentó cuando se enteró que recibiría este premio?

– LUIS MALAGAMBA: Todo premio es un mimo que reconforta, y obvio que uno lo agradece plenamente. Tal vez no se trabaje para eso. Tal vez uno siente el compromiso, todos los días, de estar al servicio de quien lo votó, y cuando llega este tipo de reconocimiento se siente reconfortado, más allá de que no sea lo que lo inspira todos los días a ponerse a trabajar en esta provincia de Buenos Aires.

– CARLOS BONICATTO: Fue una gran sorpresa y para mí es un honor porque la encuesta tiene que ver con una opinión diversa que no es sólo de los diputados, sino toda la gente del ambiente legislativo. Por otro lado, esa sorpresa se convierte en una responsabilidad porque no lo tomo como un reconocimiento propio, sino a la labor de equipo. Siempre es una sorpresa, siempre es una emoción, y como conocemos el trabajo de ustedes también, le asignamos una especial importancia

– ¿Por qué creen que resultaron los principales reconocidos?

– LM: Entiendo que los que somos de la ciudad estamos más expuestos, y al estar más expuesto puede darse este tipo de cosas. También es cierto que muchos legisladores del interior no despliegan gran trabajo aquí en la Legislatura, pero sí en su región. También creo que llega por lo que uno ha tratado de impulsar. El esfuerzo, la dedicación, es parte de un trabajo de todos los días… Digo que ojalá sirva para la gente, no otra cuestión.

– CB: Pienso que llega porque nosotros trabajamos mucho, como legisladores dedicamos mucho tiempo a la tarea legislativa en una diversidad de temas.

– ¿Cuál es el balance personal de sus trabajos legislativos?

– LM: Buenos, muy buenos. Porque debo reconocer que un sinnúmero de cuestiones que hemos impulsado han llegado a buen término. Muchas propuestas han sido leyes, y, por más chiquita que parezca, que alguien que hace dos años tiene alguna ley lo reconforta. Otras iniciativas han sido aprobadas por la Cámara que integro. Es alentador que por lo menos en el Senado se haya reparado en la importancia de las iniciativas que uno ha impulsado. Obviamente que todo lo que hemos hecho es lo que uno trata de impulsar a través de un equipo. Esto no se hace solo, esto se hace con un grupo de gente que trabaja y mucho, de lo contrario no podríamos haber hecho ni el diez por ciento de lo que hemos impulsado.

– CB: El balance ha sido positivo en la cantidad de leyes, en el tratamiento de temas que parecen secundarios o leyes que a lo mejor solucionan problemas puntuales. Ha sido positivo porque me ha permitido, a través de la Legislatura y de mi trabajo, conectarme con mucha gente y lograr que la misma participe mucho más en la tarea del legislador. Porque el legislador es votado por la gente con una responsabilidad pública, pero después se desconecta ese trabajo del conjunto de la sociedad. La gente tiene que acercarse más y darse cuenta de que su vinculación puede ser muy útil para el legislador. Hemos trabajado muchos temas en relación a la mujer, lo que nos ha permitido hacer inclusive importantes reuniones en la Legislatura a modo de concientización de los derechos de la mujer. Realizamos aportes a muchas instituciones de la ciudad y la Provincia que han tenido necesidades y, en ese sentido, esta Legislatura debe trabajar por la modificación de leyes fundamentales para las instituciones. Hemos presentado proyectos importantes del Ejecutivo, como la privatización del Puerto de La Plata, y de temas macro que han sido resultante del trabajo de muchos años.

– ¿Cuáles son sus principales proyectos, cuáles son sus ejes de trabajo?

– CB: Al cumplir 16 años de diputado se puede hacer una revisión integral y crítica. Hemos trabajado muchos temas, algunos organizadamente y otros desorganizadamente. Varios proyectos con relación a la ciudad de La Plata, con relación al patrimonio y preservación de la ciudad. También he trabajado normas relacionadas con los requerimientos de los distintos gobiernos con relación a los temas del Consejo de la Magistratura, de las leyes procesales, y a la modificación a las leyes fundamentales de Enjuiciamiento de Magistrados.

– LM: Entiendo que la tarea legislativa tiene que tener dos ejes muy fuertes: por un lado el control. Creo firmemente que los órganos legislativos tienen que funcionar como fuertes centros de control de la gestión del PE; y, por otro lado, creo que el otro eje que uno ha tratado de encontrar, y que tal vez no lo ha logrado, aunque tal vez algún día se logre pensar como una cuestión de Estado, es la inclusión social. Entiendo que estos dos ejes son los que hay que trabajar. Resolviendo el tema de la inclusión social, esta provincia va a resolver otros problemas de fondo, y muy graves, como son la salud, seguridad y la educación. Creo que hay que empezar por algo y el tema de la inclusión social es la piedra fundamental.

– ¿Cómo evalúa el desempeño del Poder Legislativo en este último año?

– LM: Le daría la nota de bueno, solamente. Me parece que faltó mayor debate, faltó mayor apertura por parte del oficialismo. Entiendo que todo esto que faltó se va a dar a partir de la nueva composición de las cámaras. Fruto de la coyuntura, por un lado, y de su abultado número, por otro, a muchas de las cuestiones el oficialismo no le dio el debate que hubieran necesitado.

– CB: Le asigno mucha importancia al Poder Legislativo, a veces se pierde un poco la relevancia que tiene la división de poderes para la República. Esto es un concepto muy sabio de la distribución y funcionamiento de una sociedad. El Legislativo no es sólo el hacedor de las leyes, sino que es la representación del pueblo, la Legislatura es la casa del pueblo, donde se discuten todos los temas y la síntesis son las leyes, las normas. Pero también ejerce una tarea de control con respecto al Poder Ejecutivo. Tenemos que consolidar cada vez más la tarea legislativa y lo que tenemos que hacer con los partidos políticos es mejorar la participación de la gente.

– ¿Cuáles creen que son los temas pendientes, tanto en particular como en general?

– CB: Me quedan pendientes temas que he trabajado y que me hubiera gustado tener resultado, como en lo que hace a la protección integral de los derechos de la mujer. También hubiera generado algunas modificaciones con respecto a leyes relacionadas con el acceso de la sociedad no sólo a las leyes, sino a la información de sus derechos. La Legislatura debe hacer el seguimiento del cumplimiento de las leyes. Por ejemplo, el Observatorio Legislativo es una figura muy importante porque no sólo debe sancionarse una ley sino saber si se está cumpliendo. Otro tema importante es que la gente participe más en la tarea del legislador. En ese sentido ha sido interesante la propuesta del presidente de la Cámara baja, Horacio González, de que las comisiones se constituyan en distintos lugares de la provincia, para discutir los temas con la sociedad.

– LM: Los temas pendientes están directamente relacionados con el saneamiento de las cuentas de la Provincia, un tema fundamental. Porque a partir de allí es cuando podremos empezar a trabajar en los temas de fondo. La Provincia está con un serio déficit, no económico que es cierto que existe, sino desde el punto de vista de la seguridad, la educación, la salud. Tema pendiente concreto, por dar un ejemplo, apertura de jardines de infantes, se presupuestó la construcción de 70 jardines y no se relaciona con la matricula y, aunque parezca mentira, esto está relacionado con la inclusión social: el chico que no entró al sistema educativo, chico que quedó afuera del sistema y después son los 500 mil chicos que ni estudian, ni trabajan. Creo que esto es el gran tema a solucionar. Yo pretendo seguir trabajando sobre estos ejes.

– ¿Cómo evalúa la relación que tiene la Legislatura con el Poder Ejecutivo?

– LM: La dividiría en dos partes. Por un lado, es la relación que tiene el propio bloque del oficialismo, que es parte de la gobernabilidad que administran mutuamente. La oposición tiene altos y bajos con respecto a su vínculo con el oficialismo. A veces me preocupa que algunos funcionarios no se dan cuenta que sentándose un ratito con la oposición avanzaría mucho más en algunas cuestiones. También debo reconocer que algunos ministros están más dispuestos a escuchar, independientemente de los resultados, pero por lo menos escuchan. De todas estas cuestiones me preocupa la impronta del Ejecutivo que abre una pantalla, dice que va avanzar, que va a solucionar y que va a escuchar y luego la hace desaparecer. Queda como que hace. Ejemplo que ocurrió recientemente: el Ejecutivo convocó a un Consejo de Seguridad, a partir de un reclamo de Margarita Stolbizer, lo hizo, se formó pero después lo desinfló y eso es lo que no sirve. A la sociedad hay que darle mensajes claro y a la oposición también. En consecuencia, los dos legisladores del Gen que integran aquel Consejo vamos a renunciar porque cada vez que se impulsó una norma sobre la cuestión, ni siquiera se convocó dicho organismo. Fue convocado para las pavadas, no para los temas de fondo y justamente se creó para las cuestiones de fondo, para las cuestiones de Estado, no para la coyuntura. Estas últimas cuestiones que fueron presentadas sobre el tema de seguridad, el consejo no fue convocado. Esto lo pongo como ejemplo de otras cuestiones que han sucedido en la relación oposición-Ejecutivo.

– CB: Es una muy buena relación en el sentido de que el Ejecutivo tiene buenas actitudes, como el diálogo entre los ministros con los legisladores para explicar normas enviadas para su tratamiento y que le son necesarias. Además, esas leyes emitidas por el Gobierno se discuten y siempre se pueden modificar si lo dispone el criterio de la mayoría de los legisladores, y el Ejecutivo acepta esa visión democrática, cuando la pretensión del gobernador a veces es modificada en función de las distintas miradas que existen en las Cámaras. Hay una riqueza muy grande en esa relación.

– ¿Cómo ven entonces la gestión de Daniel Scioli, ya promediando su mandato?

– LM: La veo muy floja, muy desarticulada, no ha logrado conformar equipos y en realidad todos los días uno no sabe con quién habla en los distintos estamentos. Salvo dos o tres ejes conductores que han logrado mantener una línea, me guste o no, pero que han marcado un destino, como son los casos de Justicia y Educación. Mientras que las demás áreas las veo muy flojas; áreas fundamentales como Seguridad, Economía, Desarrollo Social las veo sin ningún rumbo. La virtud del gobernador ha sido mantener una exposición pública que vende una imagen para las encuestas, pero cuando se escarba un poquito la gestión deja mucho que desear. La Provincia está necesitando un cambio de actitud de lo contrario no tiene destino.

– CB: A Scioli le ha tocado una gobernación difícil porque la Provincia posee problemáticas que se presentan cada día, sumado un interior donde ha habido conflictos, como la cuestión del campo. La gobernación de Scioli es buena, que a mi criterio necesitaría otro período o quizás estos dos años restantes, para poder consolidar su tarea. Me parece inteligente que el gobernador haya puesto a la Provincia detrás del proyecto del Gobierno nacional porque tiene que ver con la historia de la provincia de Buenos Aires. Desde este punto de vista ha tenido una actitud inteligente. Algo muy destacable de Daniel Scioli es que es un hombre de consenso.

– ¿Están conforme con la Reforma Política considerada recientemente?

– LM: En realidad, más allá que sufrió una suerte de modificaciones tratando de mejorarlo, hubo cuatro o cinco puntos claves que desde el GEN y otros partidos de la oposición que no fueron tocados. Fundamentalmente había cuestiones que se relacionaban con boleta única, instaurar el sistema D’Hont en las elecciones generales, entre otras cuestiones.

– CB: Va a subsanar algunos errores que se estaban cometiendo últimamente como las internas cerradas o directamente la ausencia de internas. La Argentina necesita partir de políticas fuertes y buscar que la gente pueda participar, me parece bien que las elecciones se hagan simultáneamente con la Nación porque la provincia de Buenos Aires está muy ligada al destino nacional.

– ¿Cómo ve la ampliación de la sección electoral capital?

– CB: Me parece interesante porque algunos de los partidos que se incorporan como Berisso y Ensenada, pertenecían antes al partido de La Plata. Las demás localidades adyacentes que se suman también están más ligadas a la capital de la provincia en cuestiones productivas, sociológicas y políticas, que con la tercera sección electoral, donde les era muy difícil tener una participación política activa. Vincular política y gestión va a ser muy positivo porque nos parece que la región capital es una región política con muchas posibilidades.

– LM: Desde el punto de vista técnico o regional lo veo bien. Lo único que hay que tener cuidado allí es el tema de la inconstitucionalidad, la constitución dice que La Plata constituirá una sección electoral. Hay mucho margen allí. Habría que ver algunas opiniones de constitucionalistas. Habría que ver si esto es taxativo o no, luego habrá que analizar el número de legisladores pero esa es otra discusión mucha más compleja porque implica a quienes ganan y quienes pierden.

– ¿Qué les parecen los proyectos sobre reforma contravencional y del Código de Procedimiento enviados recientemente por Scioli?

– LM: El tema de las excarcelaciones es algo que va y viene y no da resultados. Lo cierto es que hoy las cárceles están en el punto máximo de su capacidad y el tema no se ha solucionado. La Provincia no va a solucionar su problema de seguridad abriendo más cárceles y metiendo más gente presa. Y lo del Código Contravencional nos parece un absoluto despropósito, algo que se ha venido derogando durante todo el proceso democrático en función que tiene su origen en el último proceso militar, volver a ello es un retroceso que, en algunos casos, linda con lo ridículo.

– CB: No tenemos estudiada la problemática en su totalidad, se han hecho varias reuniones de bloque, pero el hecho de darle a la Policía facultades para una mejor protección, que la gente se sienta más protegida, es algo positivo, no hay que vincularlo con que se le esté otorgando a las fuerzas de seguridad una facultad negativa.