Una de las recomendaciones que recibieron los nuevos diputados de parte de sus colegas que hace tiempo transitan los alrededores del Palacio Legislativo es que siempre tengan monedas a mano… Pero no para usarlos en colectivos o en subtes, como se puede pensar inmediatamente, sino para los que están instalados en el ingreso del Edificio […]
Una de las recomendaciones que recibieron los nuevos diputados de parte de sus colegas que hace tiempo transitan los alrededores del Palacio Legislativo es que siempre tengan monedas a mano… Pero no para usarlos en colectivos o en subtes, como se puede pensar inmediatamente, sino para los que están instalados en el ingreso del Edificio Anexo de la Cámara de Diputados de la Nación.
La advertencia es porque varios de ellos eran generosos con los pedidos de ayuda, lo que los convierten en blancos permanentes de los reclamos de las personas que merodean la Casa de la Democracia.
Inclusive le contaron que varios de ellos hace años que piden ayuda, y que la señora Norma -que vive en la vereda del Anexo- ha rechazado los ofrecimientos de los diputados de conseguirle una vivienda económica. En fin…
