Mientras el kirchnerismo embistió fuerte para que se vaya, varios diputados y constitucionalistas entienden que el dictamen de la Cámara en lo Contencioso dejó a Martín Redrado suspendido hasta que el Congreso y el Poder Ejecutivo resuelvan la controversia planteada.

Al retirarse de la sede del Banco Central, Redrado fue abordado por los periodistas, a quienes dijo escuetamente: “el Congreso tiene la palabra, gracias”. Y ante la insistencia de la prensa, reiteró la frase y el agradecimiento, dos veces más.

Con lo cual, quedó claro que el funcionario todavía se siente en el cargo, a pesar de que su situación ha quedado en una confusa situación. Sucede que la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal avaló el fallo que respaldó precisamente la postura de Redrado en cuanto a no acceder al uso de divisas para pagar deuda a través de un decreto, pero hay diversas interpretaciones respecto del fallo referido al otro DNU, aquel por el cual la Presidenta lo eyecta del cargo.

A través de un comunicado, Redrado expresó su intención de seguir en el cargo, entendiendo que el dictamen deja claro que “la Cámara considera que no se ha producido el desplazamiento del presidente del Banco Central”.

Las interpretaciones de los legisladores, en tanto, son bien diversas, sin hacer diferencias entre oficialistas y opositores. Mientras el jefe del bloque del PRO, Federico Pinedo -un actor clave en esta controversia por haber impulsado las acciones judiciales que motivaron este rebote judicial del conflicto-, sostiene que la Justicia ha suspendido a Redrado hasta que se expidan el Congreso y la Presidenta; el titular de la bancada oficialista del Senado, Miguel Angel Pichetto, considera que “Redrado debe esperar el resultado en su casa”. Pichetto hacía referencia a lo que resuelva ahora el Congreso.

Pinedo entiende que la Justicia suspendió a Redrado hasta que se expidan el Congreso y la Presidenta, aunque remarcó que “ha dicho que Redrado no está removido, pero que no puede ejercer su mandato”.

Está claro que la Cámara respaldó la actuación que tuvo la jueza de primera instancia María José Sarmiento. Pero aunque avaló esa decisión, evalúa que cambiaron las circunstancias y sacó el tema fuera de la órbita de la Justicia.

El fallo dice más adelante que “se ha desdibujado la verosimilitud” de la violación reglamentaria que invocaba Redrado, que su “permanencia o desplazamiento” debe ser definido “por el juego político de los poderes Legislativo y Ejecutivo”.

Así las cosas, el Gobierno no puede designar con carácter definitivo a un nuevo presidente del BCRA.

Para el constitucionalista Félix Loñ -un jurista que tiene una visión crítica de este Gobierno-, del fallo se desprende que Redrado no puede continuar al frente del Banco Central y que si bien tampoco está firme la decisión del Ejecutivo, “ha quedado en una situación de stand by, pero más debilitado”.

A su vez, el constitucionalista Eduardo Barcesat considera que Redrado “tiene que irse a su casa”.