Si bien los propios kirchneristas salieron a poner paños fríos, cuestión de no agitar las aguas luego de que se conocieran las críticas lanzadas contra la el Gobierno nacional y provincial, diversas fuentes advirtieron sobre la posibilidad de implementar cambios en lo más alto del bloque oficialista de Diuptados.

Así es que trascendió que estaría en la mira el presidente del bloque oficialista, Raúl Pérez, quien podría ser apartado del cargo como réplica a su postura rebelde.

El tema llegó al propio gobernador Daniel Scioli, de viaje por Europa, quien a su vez trasladó la tarea a su jefe de Gabinete, Alberto Pérez, quien desde que la noticia se publicó, hizo algo más que emitir un comunicado desmintiendo una rebelión en ciernes: ha participado de numerosas reuniones para analizar la situación y tratar de apagar el incendio propio y, sobre todo, que las chispas se propaguen a la Casa Rosada y Olivos.

Desde este último destino habría salido la orden de sacar al platense Pérez, medida que se adoptaría recién en marzo.