El jefe de Gabinete argumentó así su apoyo a la decisión adoptada por el bloque oficialista del Senado, que se retiró el miércoles dejando sin quórum la sesión para elegir autoridades de comisiones.
Aníbal Fernández reivindicó la decisión de los senadores oficialistas de levantarse de sus bancas señalando que “los que dijeron tener 37 votos no los tenían”.
“Estoy de acuerdo que mi partido se haya levantado, porque los que dijeron tener 37 votos para llevar adelante esta locura, que es la oposición, no los tenían”, sostuvo el jefe de Gabinete.
En declaraciones a Radio Nacional, Fernández recordó que tanto la Constitución nacional como el reglamento de la Cámara alta avalan la actitud adoptada por el kirchnerismo y señaló al respecto que él nunca se ha quejado cuando la oposición no dio quórum.
“La democracia tiene un montón de elementos, es el ruido que genera vivir en libertad”, destacó el funcionario, para quien el oficialismo “está tratando de forzar una posición y tiene derecho a hacerlo”.
En cuanto a Menem, dijo que la oposición “históricamente lo fustigaron y ahora lo están buscando desesperadamente porque le falta la mano que levante”. Por otra parte recogió un argumento escuchado en la sesión del miércoles en el Senado, que puso como ejemplo la rivalidad entre los opositores Carlos Verna y Juan Carlos Marino, extendiéndola a otros ejemplos de relaciones “incongeniables”: Reutemann y Giustiniani, y Chiche Duhalde con Carlos Menem, más el ejemplo de los dos citados pampeanos. Con ello, el funcionario quiso dar un ejemplo de las relaciones en la oposición.
Y con relación a la decisión de Elisa Carrió de no asistir a la ceremonia del lunes, dijo que le hace daño a su salud mental hablar de Carrió, porque “no tiene toda la ropa dentro del bolso. Dice cualquier cosa todo el día, hace presagios apocalípticos, denuncias, y todo lo que dice no tiene ningún sentido”.
