“Creía que querían que haya un Parlamento sin mayorías para que el pueblo pueda presenciar un debate serio, responsable, con ideas diferentes y con propuestas. A nosotros nos criticaban por las formas, pero somos un jardín de infantes ante esta gente por las formas que tienen. Estas son las formas democráticas? Por Dios…”. Así se expresó el diputado Néstor Kirchner en un pasaje de su discurso en el estadio de Ferrocarril Oeste, donde aclaró que no pensaba insultar a sus opositores, pero sí les pidió reflexión.

El ex mandatario remarcó que “por todo lo que nos costó levantar a la Argentina, debemos tender puentes de plata a la convivencia en la diferencia sin renunciar a las ideas”.

Como siempre, resaltó la gestión de su esposa y dijo que “si no fuera por el coraje de Cristina el país estaría paralizado, con millones de trabajadores en problemas”.

Atribuyó a la oposición legislativa manejar “la máquina de impedir”, y les pidió que “defiendan sus ideas sin enojarse ni ponerse nerviosos” para “recuperar las formas que hagan que el país puedan marchar mucho mejor”.

“Los mismos que se arrodillaban ante el Fondo y no se animaron a salir con responsabilidad de la convertibilidad hoy dicen de manera apostólica, casi mesiánica y fundamentalista que no hay que tocar las reservas para no afectar el salario de los trabajadores”, sostuvo el ex presidente, que hizo una defensa del pago de deuda con reservas.

“En los 90 llegó la noche neoliberal, en la década que empezó en 2003 iniciamos la patria de la reconstrucción de los derechos humanos y la dignidad, con Cristina se profundiza el modelo de la distribución del ingreso, el avance tecnológico, y la educación para todos”, sostuvo el ex mandatario.