El gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, recibió en su provincia al diputado peronista Francisco de Narváez y ambos convergieron en la necesidad de “una Argentina del futuro, sin tanta confrontación y con más coincidencias”.
De esta manera, lo informó De Narváez al término de la entrevista en la Casa de Gobierno santiagueña. Asimismo, señaló que “parte de la conversación versó sobre el federalismo y cómo complementar el trabajo y la producción de las distintas provincias argentinas”.
En momentos en que se discute la distribución de los recursos entre la Nación y las provincias, De Narváez, el vencedor de Néstor Kirchner en Buenos Aires, ahora se reunió con un aliado estratégico del kirchnerismo para aprobar proyectos de ley en el Congreso, ya que los legisladores zamoristas han acompañado las iniciativas del Ejecutivo.
De Narváez sostuvo que “Néstor y Cristina Kirchner terminan en el 2011 y ni ellos se lo creen que van a estar hasta el 2020”, pero aclaró que “hay que tratar de que terminen bien y para eso el kirchnerismo también tiene que ayudar”.
El dirigente justicialista disidente formuló declaraciones durante una visita a esta capital del norte argentino dónde mantuvo contacto con representantes de diversos sectores de la comunidad. Estuvo acompañado por José Scioli y el legislador porteño Daniel Amoroso.
Respecto de las denuncias kirchneristas sobre supuestas actitudes golpistas De Narváez dijo: “Los Kirchner tienen muchos fantasmas en la cabeza. Acá no hay fantasmas; hay problemas reales como la inseguridad, el aumento de los precios, la salud pública desatendida y la falta de un federalismo auténtico”.
Respecto de la inflación señaló que “es generada por la desconfianza de la cadena productiva, la señora presidenta en lugar de discursear tanto tiene que sentar rápidamente al sector empresario y al sindicalismo para un acuerdo de precios que dure por lo menos 18 meses”.
“Quien más fogonea la inflación es Cristina Fernández de Kirchner cuándo todos los días reta a alguno o se pelea con alguien”.
Consultado sobre la situación de tensión en el Congreso nacional, respondió: “Ni ojo por ojo, ni estar todos los días a los bolsasos. No podemos llevar al país a una situación de conflicto permanente; hay que buscar los equilibrios en el Congreso”.
Sobre sus aspiraciones políticas personales dijo De Narváez: “Estoy recorriendo el país para conocer las preocupaciones de la gente. Yo vine a la política a sumar y no a dividir y trabajo por un peronismo unido y moderno”.
Después de criticar la injusta distribución de los recursos, “porque hoy el Estado nacional se queda con toda la plata”, De Narváez aseveró: “Néstor Kirchner le haría un gran favor al país si dejara que el gobierno de su esposa funcione”.
