El presidente de la Comisión de Justicia de la Legislatura, Gerardo Ingaramo, manifestó su sorpresa frente al pedido de destitución del ministro de Salud de la Ciudad, Jorge Lemus, presentado por la jueza porteña Elena Liberatori.

“Estas medidas constituyen una clara violación de la división de poderes consagrada en la Constitución local, siendo que en su artículo 92 excluye la posibilidad de que los jueces sean los promotores del juicio político a funcionarios del Poder Ejecutivo. Esta facultad es propia del Poder Legislativo”, argumentó el legislador porteño de PRO.

“Este claro avasallamiento a la división de poderes demuestra que cuando la Política ingresa en la Justicia, esta última sale por la ventana. El desafío que tenemos como sociedad es que cada uno pueda cumplir el rol que institucionalmente le corresponde”, señaló Ingaramo. Citando al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, el legislador coincidió en que “los jueces no deben gobernar” y agregó que “sino estarían sustituyendo a quienes fueron legítimamente elegidos para ocupar ese rol”.

Ingaramo concluyó expresando su llamado “a la colaboración entre los tres poderes de manera que cada uno cumpla su función dentro de sus límites y actúe conforme a las normas que le dan sustento”, y agregó “esto es imprescindible a fin de que se mantenga un equilibrio entre ellos y prime la convivencia armónica y ajustada a derecho”.