El diputado nacional Fernando “Pino” Solanas no dudó en afirmar que el extraño caso de un detenido por presunto espionaje en el Ministerio de Economía “es una venganza contra Lozano por las denuncias contra el canje de deuda”.

En declaraciones a Radio Continental, el diputado de Proyecto Sur dijo que “poco les puedo contar de los detalles. Lo real es que esto es una represalia por la denuncia que hizo Claudio Lozano. Esto sucede al día siguiente de que los diarios nacionales toman la denuncia y salen todas las ramas de la consultora Arcadia y Amado Boudou”.

En Magdalena Tempranísimo, advirtió que “estamos en una Argentina que no tiene límites. Un canje de deudas que incluye un negociado. Ya en 2008, los bancos y consultoras se quedan con dos mil millones de dólares. Fue doloroso para ellos que esto trascendiera”.

Solanas admitió que el detenido Larrosa “es asesor del senador (del ARI José) Martínez (no sólo de Lozano). El viernes, cuando entró al Ministerio de Economía, había policías y lo empezaron a perseguir por los pisos. El pobre desgraciado terminó escondido debajo de un escritorio porque tenía miedo”, aseguró.

“Son pésimos para armar estas cosas. Al que denuncia algo en serio le arman cosas como estas o le pueden pasar cosas peores. Estamos en una Argentina donde el periodista está escrachado en la calle con carteles”, se indignó.

“Es el ‘ministro delincuente’, el que armaba incendios en los trenes, Aníbal Fernández: tengo denuncias hechas contra él. Es el Aníbal Fernández que tuvo que escapar de la intendencia de Quilmes”, denunció.

Solanas insistió en que todo “es una cosa armada. Larrosa iba frecuentemente al Ministerio de Economía. Le arman todo esto de que va a espiar y saca información presidencial. Hasta la presidenta estaba al tanto de esta operatoria (con la consultora).

El cineasta insistió en que “los detalles los sabremos cuando Larrosa salga y se lo pueda entrevistar. Lo grave es que en el país se hagan cosas para que unos pocos funcionarios hagan negocios”.

“Uno ve en los medios públicos las campañas o cómo se trata a los opositores: ni en épocas de Menem lo vi. Esta es una escalada que no presagia nada bueno. Cuando del escrache se pasa a la calumnia y se pasa a operaciones como esta, es una cosa gravísima”, deploró Solanas.