Hubo 41 votos positivos, 29 negativos y una abstención, que fue la de la senadora Hilda González de Duhalde. Vale destacar que al inicio de la sesión, que comenzó a las 12.50, se confirmó a Patricia Vaca Narvaja como embajadora en México.
El Senado dio media sanción al proyecto del senador pampeano Carlos Verna que permite utilizar reservas del Banco Central para el pago de deuda, en un debate que tuvo una duración de casi ocho horas: la iniciativa, en la votación general, tuvo 41 votos positivos, 29 negativos y una abstención, que fue la de la senadora Hilda González de Duhalde.
Al inicio de la sesión, que arrancó a las 12.50, la ex diputada Patricia Vaca Narvaja fue confirmada como embajadora en México. También se votaron los pliegos de tres militares, que ya habían sido tratados en la Comisión de Acuerdos.
Vale destacar que el oficialismo pudo sumarle a la iniciativa de Verna un artículo en el que se especifica que el DNU 298/10 quedará derogado una vez que la ley sea publicada en el Boletín Oficial, es decir, una vez que tenga la aprobación de las dos Cámaras del Congreso. Por otro lado, el proyecto también incluye un artículo para crear una Comisión Bicameral, que estará conformada por ocho senadores y ocho diputados, que deberá controlar los pagos.
Todos los puntos del proyecto del legislador pampeano, al momento de realizar la votación particular, fueron aprobados, aunque se agregó un artículo que pidió el senador porteño Samuel Cabanchik, de Proyecto Buenos Aires Federal.´
El único ausente en el recinto de la Cámara alta fue el riojano Carlos Menem.
El debate
El primero en hacer uso de la palabra fue el titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara alta, Eric Calcagno, que defendió la iniciativa de Verna y admitió que fueron “importantes” los agregados que se le realizaron al proyecto. El legislador bonaerense explicó: “La política de desendeudamiento significa pagar lo menos posible pero, sobre todo, no hacer que la deuda externa sea el condicionante político”, y recordó que en otras épocas se dejaba que el Fondo Monetario Internacional dictamine “las reglas de comportamiento político”, algo que consideró inaceptable.
Por último, Calcagno declaró que “las reservas de libre disponibilidad son la expresión de una política macroeconómica, tanto del Banco Central como del ministerio de Economía”, y dijo que el objetivo “es tratar de dejar a la Argentina un poco mejor”.
Luego le tocó el turno a la radical Laura Montero, que es la titular de la Comisión de Economía Nacional e Inversión, que soslayó: “Lo principal es que estamos de acuerdo con el uso de las reservas, y estamos muy de acuerdo con una política de desendeudamiento”, aunque resaltó que “la inflación no es poca cosa cuando uno decide un instrumento para poder desendeudarse, hay que reformular el INDEC, y nosotros tenemos un proyecto presentado sobre el tema”. La legisladora mendocina destacó que “si hoy tenemos inflación no es para obviarla, es un síntoma de enfermedad de nuestra economía”, y concluyó: “Espero que el Gobierno Nacional no le entregue al Banco Central papeles decorativos por cumplir la función de prestamista, espero que sean de reconocida solvencia”.
Verna, autor de la iniciativa junto con su compañera de bloque, María Higonet, insistió que “hubo algunos senadores y medios de comunicación que señalaban que mi proyecto es espejo del DNU 298, pero no lo es”, y señaló que en Argentina “no tenemos estadísticas confiables, si pedimos crédito, nos exigen números, y los de nuestro país no son confiables”, aunque puntualizó que comparte el desendeudamiento porque “el Estado va a acceder a créditos más baratos”. Y finalizó con un pedido: “Espero que las deudas con las provincias sean saldadas”.
El peronista disidente Juan Carlos Romero aseguró que “el fin no justifica los medios, el Gobierno Nacional, con tal financiarse, hace cualquier cosa, ahora le toca el turno a las reservas”, y reflexionó: “Los argentinos nos encaprichamos y seguimos hasta el final, no se justifican estos decretos, esta danza podría haber terminado mucho antes”. Por último, el legislador salteño indicó que “se adulteran las estadísticas y las reglas de juego, no se le da confianza al sistema”, y pronosticó: “El año que viene vamos a estar discutiendo lo mismo”.
Por su parte, la correntina Josefina Meabe, que fue autora de otro proyecto de ley sobre el tema junto a su colega José María Roldán, afirmó: “Quiero dejar en claro que estoy de acuerdo con el fondo de desendeudamiento y con el pago de las reservas de las deudas”, aunque adelantó que votaría negativamente debido “a la exclusión que se hace en relación con la contemplación de los problemas provinciales”.
El porteño Samuel Cabanchik, de Proyecto Buenos Aires Federal, manifestó que “la credibilidad no la vamos a recuperar por decreto, es al revés, se va a minar porque nosotros no respetamos nuestras propias reglas de juego”, y opinó, respecto del comienzo de la novela de los DNU, que se “ha caminado de forma inversa debido a que todo comenzó después de las sesiones ordinarias, y no se llamó a sesiones extraordinarias para tratar el tema”.
“Hacer esto nos permitiría que nuestro país pueda salir de cara al mundo cumpliendo sus obligaciones”, vaticinó la rionegrina María José Bongiorno, que se mostró a favor de la iniciativa de Verna, y reiteró que “apoyar el pago de deuda con reservas de libre disponibilidad favorece a la gobernabilidad”.
El radical Mario Cimadevilla indicó que la sanción del primer DNU en diciembre de 2009 “no fue legal ni constitucional”, y precisó que “el Congreso debe recuperar iniciativa y gestión para hacerse cargo de los problemas del país”. Además juzgó que el Gobierno Nacional es incongruente porque “dice que nos desendeudamos para endeudarnos”. El legislador chubutense puntualizó: “Por más que quieran señalar que estamos dentro de lo que la Constitución prevé, yo digo que es un atropello para las personas de derecho”.
Una postura más dura fue la del correntino Eugenio “Nito” Artaza: “Hoy debatimos una ley para volver a pagarles a los banqueros, la pregunta a hacerse es quién va a terminar pagando esta fiesta”, y dijo que “busco por todo este proyecto y no encuentro un solo artículo en beneficio de las provincias argentinas”. El legislador radical también explicó que había dado su apoyo a la iniciativa de Meabe y Roldán ya que “se le perdonaban a las provincias el 50 por ciento de la deuda que tienen con el Estado”, y declaró que espera “que esta insensatez”, en relación con el proyecto de Verna, “no pase en Diputados”.
“Para que sea serio, un país debe pagar sus deudas”, alentó la santiagueña Ana María Corradi de Beltrán, que se mostró a favor del tema en discusión. Luego tuvo la palabra Higonet, otra de las que participó de la creación del proyecto: “Va a permitir dar señales claras y positivas para el mercado internacional y se va a poder aumentar la capacidad de financiamiento”, pero expresó que no está de acuerdo “con la decisión del Poder Ejecutivo, que toma el mecanismo de los DNU; creo que se deben respetar las instituciones, es aquí en el Congreso donde se deben discutir todas las medidas de fondo que tengan implicancia en la sociedad”. La senadora pampeana añadió: “Yo también quiero una Argentina mejor y un país más creíble, que nos permita contar con más y mejores inversiones y créditos para tener más empleo y una mejor calidad de vida para todos los argentinos”.
“Avalando esta iniciativa mostramos que Argentina tiene voluntad de pago”, detalló el sanjuanino César Gioja, mientras que la bonaerense Hilda González de Duhalde dijo: “Tengo miedo que se embarguen los fondos porque esta ley es muy parecida al DNU”. Sin embargo, la legisladora tomó una postura que llamó la atención: sostuvo que se iba a abstener de la votación.
La salteña Sonia Escudero expresó que el proyecto “es una trampa, no es cierto que van a bajar las tasas de interés, para que baje el interés y para que el sector productivo consiga tasas razonables hace falta seguridad jurídica; lo que se propone con el Fondo de Desendeudamiento no es desendeudar al país, sino canjear deuda de tenedores privados por deuda con el Banco Central”, y señaló que “hay que arreglar las estadísticas para que se respeten las instituciones”.
“Sin autonomía política no hay justicia social”, soslayó el formoseño José Mayans, que declaró que el Gobierno Nacional, a través de un camino de política fiscal responsable, apunta a ese objetivo. En clara oposición a esa postura, la puntana Liliana Negre de Alonso advirtió que las reservas son necesarias “para garantizar el peso, los salarios y los presupuestos provinciales”, entre otras cosas.
“Aunque el oficialismo hoy tiene el número para aprobar este proyecto de ley, siguen dejando abierto interrogantes muy grandes que vengo a plantear”, comenzó el senador y titular del Partido Socialista, Rubén Giustiniani, que agregó: “Este canje de deuda abre importantes dudas, ya que puede significar un negocio para los intermediarios que son los mismos bancos que están siendo investigados por defraudaciones en otras partes del mundo”. Vale destacar que el legislador santafesino pidió una cuestión de privilegio contra el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, que declaró este lunes que el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, “necesita resolver temas de importancia para su provincia y nosotros debemos apoyarlo, pero encontrábamos a la hora de discutir políticas públicas, en cabeza de Giustiniani en el Senado, una visión absolutamente distinta que esta manera de pensar”.
El líder del Peronismo Disidente en la Cámara alta, Adolfo Rodríguez Saá, reflexionó: “Creo que esta sesión ha sido muy positiva porque quedó en claro que se puede discutir, creo que así se construye la gobernabilidad”, aunque ratificó al terminar su discurso que su bloque estaba dispuesto a votar en contra del proyecto de Verna.
Por su parte, el titular de la bancada radical en el Senado, aseguró que el ingreso del artículo que plantea que los DNU del desendeudamiento perderán su efecto una vez que sea ley el proyecto de Verna, fue producto de un arreglo por 600 millones de pesos de deuda que tenía el Gobierno Nacional con La Pampa, que ya fue cancelada: “Esta ley se tendría que llamar la ley de los 600 millones”, exclamó Morales, y agregó que esta situación “marca el nivel de decadencia que hay en el país, sería muy peligroso pensar que se empieza a instaurar la cultura de que el más vivo se impone porque perjudica al otro”.
El último en hacer uso de la palabra fue el presidente del bloque oficialista en la Cámara alta, Miguel Ángel Pichetto, que manifestó: “No hubo un capricho de la Presidenta, no quiso burlar el Congreso”, en relación con los DNU del desendeudamiento. Además recomendó que “lo que no hay que hacer es intentar modificar las política económica y financieras del Gobierno Nacional desde el Congreso”.
En contra del proyecto para el pago de deuda con reservas (29)
UCR (16): Pablo Verani, Juan Carlos Marino, Laura Montero, Ernesto Sanz, Blanca Monllau, Oscar Castillo, Roy Nikisch, Eugenio “Nito” Artaza, José Cano, Emilio Rached, Gerardo Morales, Ramón Mestre, Arturo Vera, Luis Petcoff Naidenoff, Alfredo Martínez y Mario Cimadevilla.
PJ disidente (6): Adolfo Rodríguez Saá, Liliana Negre de Alonso, Roberto Basualdo, Sonia Escudero, Juan Carlos Romero, Carlos Reutemann.
Provinciales (2): Josefina Meabe, José Roldán.
Frente Cívico (2): Luis Juez y Norma Morandini.
CC (1): María Eugenia Estenssoro.
PS (1): Rubén Giustiniani.
PRS (1): Juan Pérez Alsina.
A favor del proyecto para el pago de deuda con reservas (41)
FpV (30): Blanca Osuna, Pedro Guastavino, Fabio Biancalani, Elena Corregido, Daniel Filmus, Adriana Bortolozzi, Marina Riofrío, Marcelo Fuentes, Miguel Ángel Pichetto, César Gioja, José Mayans, Nanci Parrilli, Daniel Pérsico, Rolando Bermejo, José Pampuro, Sergio Mansilla, Beatriz Rojkes de Alperovich, Jorge Banicevich, Liliana Fellner, Nicolás Fernández, Eric Calcagno, Lucia Corpacci, Luis Viana, Élida Vigo, Eduardo Torres, Ada Maza, Teresita Quintela, Guillermo Jenefes, Marcelo Guinle y Mario Colazo.
Aliados (5)
ARI Fueguino (2): María Rosa Díaz y José Martínez.
FCxS (2): Ada Iturrez de Cappellini y Ana Corradi de Beltrán.
MPN (1): Horacio Lores.
Otros (6)
PROBAFE (1): Samuel Cabanchik.
PJ La Pampa (2): María de los Ángeles Higonet y Carlos Verna.
PJ Río Negro (1): María José Bongiorno.
PJ Chubut (1): Graciela Di Perna.
PJ Santa Fe (1): Roxana Latorre.
Abstenciones (1):
PJ Disidente (1): Hilda “Chiche” González.
Ausentes (1):
PJ La Rioja: Carlos Menem.
