A través de una carta el canciller le solicitó al titular de la Cámara de Diputados que "haga público" el testimonio completo que el ex embajador de Venezuela pronunciase durante su exposición ante la Comisión de Relaciones Exteriores. "Es necesario que el pueblo conozca la verdad", dijo.
El nuevo canciller de la Nación, Héctor Timerman, le envió una carta al presidente de la Cámara baja, el diputado del Frente para la Victoria Eduardo Fellner, que haga público el testimonio completo que el miércoles pasado brindó el ex embajador de Venezuela Eduardo Sadous ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Parlamento.
“Como es de su conocimiento, luego de brindar su testimonio el Embajador, algunos medios comenzaron una ofensiva, pocas veces vista, para publicar supuestos dichos brindados por el funcionario. Debo confesarle que el lugar que dichos medios siguen concediendo a lo sucedido en una reunión secreta aumenta mi preocupación con el paso de los días”, afirma en la misiva el flamante canciller de la Nación.
Y agrega: “Usted comprenderá que en la dinámica de las relaciones diplomáticas que la Argentina mantiene con 182 países, hay situaciones que requieren cierta confidencialidad. No me extrañaría que muchos países, enterados de esta situación, podrían dudar sobre la confiabilidad que desde nuestra independencia siempre ha honrado la República Argentina”.
Timerman subrayó la importancia que tiene que el “pueblo conozca la verdad sobre los actos de gobierno y que éstos no sean distorsionados por intereses sórdidos de sectores corporativos que anteponen sus mezquindades a costa del bienestar de la sociedad toda”.
“Así es que luego de reflexionar profundamente sobre estos acontecimientos es que le solicito, como Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, que usted haga público el testimonio completo tal como ha sido registrado por el cuerpo de taquígrafos del Honorable Congreso de la Nación”, manifestó.
Por último, Timerman consideró además que haciéndose público dicho testimonio, se podrá “llevar tranquilidad a una sociedad bombardeada con información falsa vertida con un interés avieso y mendaz”.