Con el objetivo de acortar el margen de actividades ilegales y resguardar el interés de los usuarios, la Legislatura de la provincia de Buenos Aires evalua crear un “Instituto Regulador del Servicio y la Reparación de Automotores” que se encargará de hacer cumplir en cada taller la obligatoriedad de contar con un “Director Técnico” responsable de todas las reparaciones que se realicen en ese establecimiento como así también de los trabajos que se concreten en ese lugar a través de un “Libro de Registro”.

Se trata de un proyecto de ley presentado por el diputado bonaerense del Peronismo Federal, Juan Carlos Piriz, por el cual se intentará que todos los talleres de reparación y mantenimiento de vehículos automotores que tengan asiento en la provincia de Buenos Aires se encuentren bajo la supervisión del “Instituto Provincial Regulador del Servicio y la Reparación de Automotores (IPRESERA)”.

El IPRESERA será un organismo autárquico, que entre sus funciones tendrá que hacer cumplir en los talleres bonaerenses la obligatoriedad de contar con un “Director Técnico responsable de las reparaciones”, como así también un “un Libro de Registro” de esos arreglos.

Para poder desempeñarse como “Director Técnico”, será necesario que esa persona “acredite un mínimo de cinco años de experiencia trabajando en un taller de servicios de reparación y mantenimiento de automotores, debiendo demostrar conocimientos generales a través de un examen y cursos que establezca” el IPRESERA.

Según determina la iniciativa que evaluará la Cámara de Diputados bonaerenses, “el Director Técnico tendrá por funciones la organización, desarrollo y control de las actividades del taller, responsabilizándose, junto al propietario, de todas las reparaciones efectuadas en el mismo, y del cumplimiento por el taller de todas las obligaciones exigidas reglamentariamente”.

“Sabemos que los talleres de servicios y reparación automotriz tienen grandes responsabilidades, son importantes en la prevención de accidentes, mantienen a un inmenso parque automotor y además son el eje de una gran actividad económica que incluye autopartes, servicios, neumáticos, rectificación, mecanizados, servicios de lavado y engrase; por otra parte, también son el canal propicio de repuestos usados para automóviles, pic ups, camiones, maquinas agrícolas, viales de todo tipo”, explicó el legislador bonaerense.

Piriz añadió que “la utilización de autopartes no homologadas fundamentalmente las de seguridad son de altísimo riesgo para el usuario y quienes lo acompañan como así también para terceros circunstanciales”.

“Cabe destacar que en el mismo rango están los repuestos usados, no todos son recuperables, especialmente los de seguridad, sumado al riesgo por colocación está el origen de los mismos, muchos de procedencia desconocida, lo que hace presuponer que pueden estar manchados con sangre”, advirtió.

Asimismo, el diputado bonaerense argumentó que “habiendo un registro de talleres obligatorio y que cada uno tenga un director técnico habilitado, independiente del control municipal, acortará el margen para actividades ilegales y resguardará el interés de los usuarios, hoy por cierto, bastante desprotegidos”.

“Esta ley, incentivará a quienes desarrollan esta actividad a perfeccionarse y actualizarse periódicamente, como así a interiorizarse de las leyes y reglamentaciones que hacen al cuidado del medio ambiente, seguridad en el trabajo y derechos de los usuarios”, finalizó Piriz.