“Ojala podremos trabajar más ordenadamente. Fueron tiempos difíciles. Hubiésemos querido llegar a fin de año con resultados más acordes a nuestros deseos políticos. Pero esto es justamente política”, dijo el diputado Eduardo Fellner al asumir su banca en el estrado de la Presidencia de la Cámara baja.

El reelecto presidente por cuarta vez adelantó que “se avecina un año tan o más difícil -que el 2010-“. “Se avizora un año 2011 muy dificil” en el que se va a debatir “tema por tema”, y que la realización de las sesiones deberán contar con “la mayor voluntad de los distintos bloques”.

Al respecto de la posibilidad de que el Congreso quede paralizado el año próximo por las elecciones provinciales y presidencial, Fellner consideró que “el desafío está en encontrar un punto de equilibrio con la política y la actividad parlamentaria, la institución Congreso que todos debemos respetar”.

Con respecto al balance del año legislativo, el diputado oficialista aseguró que no es cierto que fue un año malo para el Congreso, ya que “ha habido muchísimo debate político y algunos proyectos han avanzado en las comisiones”.

Asimismo, Fellner manifestó que “han quedado varios sin sabores, varios proyectos en el tintero” que serían debatidos en el próximo año porque no habrá sesiones extraordinarias.