Los une la pasión por el trabajo. Una característica que propios y extraños les reconocen a Rubén Giustiniani y Graciela Camaño. El único representante socialista en la Cámara alta tuvo un año particularmente importante en lo personal, a partir de la valoración que sus proyectos tuvieron, de los que rescata fundamentalmente el del 82% móvil. Aunque también reivindica el proyecto sobre la mayoría de edad a los 18 años, que es de su autoría, que en realidad fue promulgado a fines del año pasado. También a fines de 2009 arrancó el año legislativo para los diputados, donde Camaño fue una figura central, precisamente en esa sesión en la que la oposición le arrebató al oficialismo la mayoría de las presidencias de comisiones. Recordemos que entonces la diputada del bloque Peronista apeló al reglamento para, en su condición de titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales, dar inicio a esa recordada sesión de la que participó el propio Néstor Kirchner.

También en su condición de presidenta de Asuntos Constitucionales fue que encabezó el último gran debate del año en comisión, que concluyó con el cachetazo a Carlos Kunkel.

Pero además de la pasión por el trabajo legislativo, ambos tienen expectativas ejecutivas. Las cuales pondrán a prueba el próximo año, cuando esperan ser, en sus respectivos distritos, candidatos a gobernador. De ese tema y muchos más hablaron en una extensa nota con Semanario Parlamentario.

– ¿Qué significa para ustedes este premio del Semanario Parlamentario?

Graciela Camaño: Mi año fue muy particular y eso hace a este premio muy especial. Lo valoro muchísimo, me siento muy gratificada.

Rubén Giustiniani: Es muy importante, es un reconocimiento a una tarea, a un esfuerzo y a una dedicación en todo lo que significa el trabajo parlamentario que uno realiza. Muy importante, sobre todo viniendo de una publicación tan prestigiosa como es Semanario Parlamentario, que viene marcando desde hace muchos años una impronta en todo el ámbito del Congreso de la Nación, a modo de información de lo que pasa en el Congreso para los legisladores y a modo de intercambio también en distintas cuestiones que hacen a la labor que tenemos que realizar en el Congreso. Por eso recibir de Parlamentario esta distinción también es una responsabilidad hacia delante para la tarea que viene.

– Haciendo un balance general de este año, el trabajo legislativo ha sido uno de los menos productivos en los últimos tiempos. ¿Por qué?

RG: Pero debemos destacar que el Congreso sancionó la ley más importante en décadas, que es el 82% móvil para los jubilados, que luego fue vetada por el Poder Ejecutivo, pero fue una sanción de este Congreso. Es muy importante porque es una ley que no tenía antecedentes en el Congreso de la Nación desde hace décadas y al haber sido uno de los iniciadores, para mí también es una gran satisfacción que esta ley se haya podido aprobar y darle el 82% del mínimo, vital y móvil a los trabajadores en actividad como piso de dignidad, aplicar la escala Badaro en los restantes jubilaciones. Por eso entiendo que solamente la sanción de esa ley representa un hecho para el Parlamento muy importante y por eso vamos a insistir el año que viene con el proyecto de consulta popular, para que la ciudadanía se exprese y no pueda ser vetada. Y de esa manera no quede trunca la esperanza de cinco millones y medio de jubilados.

– ¿Por qué cree que la vetó el Poder Ejecutivo?

RG: En primer lugar lo que hay que aclarar que la Corte Suprema de Justicia de la Nación ha sido contundente en fallo Badaro uno y Badaro dos, la Cámara Previsional se acaba de expresar en el mismo sentido de una movilidad digna para los jubilados. El artículo 14 bis de la Constitución es muy claro al respecto y por lo tanto de una vez por todas hay que hacer una política de estado y terminar con esta situación perversa donde se patea la pelota para adelante. Por cada juicio que se paga entran diez más, hay cuatrocientos mil juicios que se están sustanciando. Así como se tiene que pagar la deuda externa y se dice desde el Poder Ejecutivo cuando se paga, que hay que honrar la deuda externa, nosotros decimos que la deuda interna y social también hay que honrarla y hay que pagarla.

Pero además esto se da en un contexto donde tenemos una ANSES rico con jubilados pobres. La manera de terminar con esta inequidad es asumiendo el 82% móvil como política de estado, no para este gobierno sino para todos los gobiernos que vengan.

– A usted, diputada, ¿le pareció un año poco productivo?

GC: No se trata sólo de producción legislativa. A este año hay que ponerlo en un contexto. La pobreza parlamentaria fue el resultado de una estrategia del Ejecutivo. Cerrar el Congreso para que no se exprese la oposición. Es lamentable, máxime si consideramos que quien hoy ocupa la Presidencia de la Nación hizo su carrera política en el Parlamento. De todos modos he conocido años peores, donde las iniciativas de legisladores se desechaban y sólo se trataban los proyectos del Ejecutivo. ¡Y qué proyectos!

– La oposición tenía mayoría en ambas cámaras, sin embargo no pudieron sacar muchas leyes que prometieron en campaña electoral. ¿Qué pasó?

GC: Sería injusto no evaluar que el Senado no tuvo el recambio que sí hubo en Diputados. La oposición no tuvo quórum propio. Y cuando uno no quiere, dos no pueden. El próximo año podrán revisar lo que Diputados envió con media sanción.

RG: En el Senado la situación fue distinta que en Diputados; el solo hecho de que las elecciones pasadas se hubiera renovado un tercio del Cuerpo, no la mitad como en la Cámara baja determina que hubo un escenario de mucha paridad y que esta situación se hizo más compleja todavía donde hubo algunos senadores y senadoras que en algunas votaciones acompañaron a la oposición y en otras mayoritariamente acompañaron al oficialismo. Por eso nos vimos impedidos de sacar layes como la reforma al Consejo de la Magistratura, los Decretos de Necesidad de Urgencia o los “superpoderes”.

– Varios temas importantes quedaron pendientes: Consejo de la Magistratura, DNU, superpoderes, INDEC entre otros. ¿Que pasará con estos proyectos en el próximo período legislativo?

GC: No competen ya a Diputados. Todos fueron temas muy trabajosamente logrados por nosotros. El próximo año serán los senadores los que deban tratarlos.

– ¿Se podrán tratar el próximo año estos temas?

RG: El próximo año tenemos que insistir con los dos ejes fundamentales para el país que es lo que la sociedad está esperando y que es la mejora de la calidad institucional a través de estos temas, de mayor transparencia sobre todo lo que hace al uso de los fondos públicos y la segunda cuestión es la redistribución del ingreso. Por eso el año que viene vamos a insistir con propuestas como el 82% móvil a consulta popular, desgravar la renta financiera, tienen que pagar los que más tienen y más ganan en la Argentina, no como hoy que a través del IVA impuesto indirecto al consumo son los sectores populares los que sostienen la recaudación. Por eso eliminar el IVA a los productos de la canasta básica de alimentos también van a ser otros de los temas que vamos a insistir para poder tratar en el próximo período legislativo.

– Teniendo en cuenta que 2011 será un año electoral, ¿considera qué se van a profundizar las diferencias en el arco opositor?

GC: Seguramente, no somos iguales y todos tenemos legítimas aspiraciones.

RG: Siempre sostuve, a diferencia de otros análisis que se hicieron después de las elecciones de junio del año pasado -desde mi punto de vista, un poco apresurados- que la oposición había triunfado. Evidentemente el Gobierno salió derrotado, sobre todo en la provincia de Buenos Aires, donde fue con candidaturas testimoniales, con Néstor Kirchner como candidato; además, habían adelantado las elecciones y habían volcado en ese distrito ingentes recursos, y allí en definitiva perdieron las elecciones. Pero no quedó una oposición triunfadora. La oposición tiene distintas expresiones y eso se va a notar más de cara a un año electoral como el que viene. Por lo tanto, no va haber una oposición, sino va haber distintos sectores que ya se expresan electoralmente. Va a haber un Frente Progresista, que es el que nosotros estamos intentando conformar con el radicalismo, con Proyecto Sur, con el GEN de Margarita Stolbizer y con el partido de Víctor De Gennaro, y evidentemente está el Peronismo Federal, más cerca del PRO, con el que puede llegar a confluir en una propuesta electoral. Esto va a marcar la impronta legislativa….

– En este Frente Progresista usted no mencionó a la Coalición Cívica. ¿Están cerradas las puertas al partido de Lilita Carrió?

RG: Nosotros creemos que el del Frente Progresista tiene que ser el programa; todos con quienes coincidamos en un programa de cambio del país pueden estar expresados, por lo tanto las puertas están abiertas para todos los que intenten o quieran integrarse a este Frente Progresista que planteamos desde esa perspectiva. La Coalición Cívica planteó que van a tomar ellos una decisión propia, ojalá sea en el sentido de integrarse a este Frente Progresista.