En los pasillos de la Secretaría de Comercio Interior se comenta en voz alta que se viene una restricción a determinados productos extranjeros. La idea es mejorar la balanza comercial.
Después de varias reuniones, de idas y vueltas, la Secretaría de Comercio Interior, que conduce el polémico Guillermo Moreno, pondría en los próximos días un freno importante a la importación de determinados productos, esencialmente alimentos, textiles, juguetes y algunos electrónicos.
Moreno tuvo una reunión con diversos empresarios, especialmente supermercadistas, a quienes les comentó que sí o sí la balanza comercial del próximo año tiene que cerrar mucho mejor de lo que fue 2010.
La realidad de estos días es que se ha profundizado la restricción a las importaciones de determinados productos, más allá de las medidas antidumping que aplica el Ministerio de Industria.
También hubo un encuentro que mantuvo Débora Giorgi, ministra de Industria, con ejecutivos de la Cámara de Importadores de Automotores (CIDOA) y el mensaje fue el mismo: que se busque reducir la importación de vehículos.
A todo esto, en el Palacio de Hacienda aseguran que lo que se busca no es frenar las importaciones, sino tener un comercio exterior cada vez más “administrado” para poder mejorar el perfil de la balanza comercial.
En Casa de Gobierno aseguran que la estrategia de restringir el ingreso de productos importados sirvió para mejorar la balanza, ya que se calculaba un superávit para todo el año de 10.000 millones de dólares y ya en noviembre se ubicó por encima de los 11.000 millones de dólares.
No obstante, son varios los sectores del comercio local que se oponen a esas medidas. “Tenemos enormes problemas para poder ingresar mercadería que ya está en el país, pero que Aduana no la deja salir”, sostuvo el gerente de una de las cadenas de jugueterías más importantes del país.
Algo parecido ocurre con los artículos del hogar. “Indudablemente que hay muchos inconvenientes para el ingreso de productos electrónicos, especialmente aire acondicionado y equipos de computación”, subrayó el responsable de equipos de computación y aire acondicionado. “Es indudablemente un problema”, se quejó el titular de una casa de electrodomésticos.
Es más, se sabe que han tenido serios problemas y faltantes en el mercado local sectores como aparatos de gimnasia y productos de perfumería.
Tanto en el Ministerio de Industria como en la Secretaría de Comercio se esfuerzan por demostrar que no hay problemas con las importaciones en el país, que puede haber alguna “demora y nada más”.
Es evidente que el plan económico, por más crecimiento que haya, tiene puntos débiles. La balanza comercial sigue siendo un punto para tener en cuenta, pero la lógica indica que las medidas de carácter restrictivo en el mediano y largo plazo nunca tienen efecto positivo.
