El diputado nacional Ricardo Buryaile dijo que “el Gobierno nacional siente un profundo odio por el productor agropecuario y no tolera las discrepancias, pese a que ha fracasado en su política productiva. Mientras el mundo alrededor crece de la mano del aumento del consumo, Argentina no lo ha hecho como lo hicieron Uruguay o Paraguay; ni siquiera hablo de Brasil”.

En declaraciones a Radio de la Ciudad (AM 1110), el legislador añadió: “No acepta el disenso y que haya alguien que esté por afuera de la órbita del poder que maneja algún ministro o el secretario de Comercio. La relación entre el campo y el Gobierno definitivamente está rota por el preconcepto que tiene la Presidenta y sus ministros o como tenía su ex marido. Uno escucha a Aníbal Fernández hablar del sector agropecuario y se nota que tiene un profundo desconocimiento y desprecio hacia una actividad importante”.

En este marco, el ex vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), denunció: “Lo que está pasando con el tema del trigo es una estafa. Acá hay molinos que se han llenado de plata estos últimos cinco años. Pero como generalmente se dice: la culpa no es del chancho sino del que le da de comer”. En esa dirección, agregó: “Los molinos han ganado más de 3.000 millones de dólares sin que esto se traduzca en beneficios para el productor o consumidor, ni siquiera para el Estado. Esto me hace pensar que debe haber alguien del Gobierno interesado en el negocio de los molinos. No se beneficia alguien, salvo algunas empresas. Tienen amigos empresarios o son parte del negocio, porque otra cosa no me cabe”.

Al hacer referencia a la situación que vive hoy el agro a raíz de la sequía, Buryaile puntualizó: “Esto muestra que lo que la Presidenta dijo alguna vez que el campo era una actividad segura, una vez más se tira por la borda. Los únicos seguros con los negocios de casinos, esos están programados”. Y afirmó: “La sequía ha golpeado muy duro a la producción de maíz ya en forma irreversible. Se calculaba una cosecha de 26 millones o 27 millones de toneladas de maíz. Hoy quizá no se llegue a 20 millones; es una cifra importante. En cuanto a la soja, se esperaba alrededor de 52 millones de toneladas y s estima que se puede llegar a 45 millones de toneladas. Esta es mucha plata que se pierde, mucha gente que va a estar tremendamente afectada”.

Seguidamente, el legislador formoseño detalló que “en el caso del maíz, por cada día que no llueva en alguna zona, el productor pierde 400 kilos por hectárea. En algunos lugares los rindes dan muy buenos, como 8.000 o 10.000 kilos. Esos lugares, por día, pierden 400 kilos. Por eso, hay zonas que en 10 días bajarán a la mitad de los rindes. Es preocupante porque mucha gente veníamos de un año bueno. La campaña 2008-2009 no fue buena por la sequía. La 2009-2010 fue extraordinaria climáticamente y la 2010-2011 viene muy complicada.