El gremio de personal técnico aeronáutico se despegó de otros sindicatos de la actividad y reafirmó su postura respecto a la aerolínea de bandera y las especies que circularon los últimos días.
El titular de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico, Ricardo Cirielli, aclaró que la entidad que él conduce no participó de la reunión que mantuvieron el pasado 5 de marzo las entidades gremiales aeronáuticas APA, UPSA,AAA, APLA y ATEP, para analizar el futuro de Aerolíneas Argentinas y Austral, ni las declaraciones de la presidenta Cristina Fernández ante la Asamblea Legislativa.
Al respecto, APTA puntualizó que no emite opinión ni adopta decisiones respecto de versiones y especulaciones periodísticas, que además han sido desmentidas oficialmente por quien se supone es el protagonista de las mismas, el Gobierno Nacional. Asimismo recordó que la Presidenta de la Nación “ha demostrado permanente y públicamente desde el 2008, su voluntad personal y política de preservar las fuentes y puestos de trabajo, que representan Aerolíneas Argentinas y Austral”.
En un comunicado, el gremio que conduce Ricardo Cirielli recordó que esa entidad no ha realizado desde la reestatización de AA ninguna medida de fuerza, por lo que “nunca ha usado a los pasajeros de ambas compañías, los dueños de las mismas a quienes solventan generosamente con sus impuestos, de rehenes”.
“APTA considera que Aerolíneas Argentinas y Austral deben recibir, como las mayores líneas aéreas nacionales y la primera además como la de bandera, todos los subsidios directos e indirectos necesarios, al igual que los tienen todas las líneas aéreas del mundo en similar condición -agregó-. Para garantizar dentro de una política aerocomercial estatal a corto, mediano y largo plazo, la comunicación aérea social y comercial dentro del vasto territorio nacional y posibilitar el desarrollo integral de nuestra economía. Convirtiéndose, también, en instrumentos insustituibles para la existencia y expansión del turismo nacional. Lo que no las excluye, sino que las compromete más, de ser administradas con transparencia, excelencia, eficiencia y rentabilidad. Como lo son regional e internacionalmente llevando pasajeros y carga, las aéreas en su misma situación. Condiciones indispensables para consolidarse y ser viables a futuro, como medios de transporte aéreo y como fuentes de trabajo aeronáutico”.
Aclaró la entidad que “nunca ha propiciado ni ha estado, detrás de “negocios” personales ni organizacionales. Sean de la patria sindicalista o de la patria privatista. A expensas del control de Aerolíneas Argentinas y Austral, y sin escrúpulos morales, ideológicos ni políticos para lograrlos. Además de total indiferencia, por el riesgo grave de supervivencia al que se exponen a ambas empresas”.
Cargó también contra APLA, UPSA, AAA, APA y ATEPSA, a las que endilgó utilizar “un manifiesto accionar amarillista e inmoral, al pretender operar dentro de la interna gremial de APTA. Usurpando el símbolo de nuestro sindicato y afiliados, como convocando y dando participación a ex dirigentes y miembros de APTA, repetidamente repudiados y expulsados de nuestra institución por la totalidad de sus bases, por corruptos, pro patronales y represores. A efectos de simular ante la opinión pública, una representación y apoyo gremial, del que con APTA carecen plenamente”.
“Quienes utilizan tales falacias y engaños para desplegar su accionar, al igual que en el pasado hicieron como cómplices de Iberia y Marsans, demuestran con sus hechos lo que en verdad ocultan con sus histriónicas declaraciones y puestas en escena públicas: lo espurio, codicioso, elitista y antinacional de sus reales intenciones y fines”, concluye el comunicado.
